López Obrador, exhortó hoy a sus adversarios, a los que calificó como conservadores, a que “no coman ansias”, ya que en 2022 se podrá convocar a la gente y decidir si continúa o no como presidente de la República.
Ayer en diversos estados del país se llevaron a cabo manifestaciones para exigirle al mandatario federal su renuncia por lo que consideraron a sido una deficiente conducción del país.
El jefe del Ejecutivo acusó que estos grupos actúan de forma individualista y sobretodo están en contra del destierro de la corrupción y seguir tendiendo privilegios del gobierno.
“Tenemos que ir hacia adelante y seguir con la transformación de la vida pública de México porque la peste, no pandemia, la peste que más ha dañado a México ha sido la corrupción y hay que desterrar la corrupción y por eso no podemos dar ni un paso atrás, eso no lo entienden nuestros adversarios que protestan, que quieren que yo dimita, que yo me vaya del gobierno", expuso.
“Que no coman ansias; yo mismo establecí las reglas porque soy un hombre de principios, no voy a estar en el gobierno si el pueblo no me apoya, no me respalda”, afirmó el mandatario federal desde su casa en Palenque.
El jefe del Ejecutivo recordó que el próximo año habrán elecciones y ahí el pueblo podrá optar por regresar al régimen conservador y de corrupción o apuntalar la transformación de Mexico.
Reiteró que será respetuoso de lo que los ciudadanos en las urnas y está preparado para que en 2022 los ciudadanos evalúen su desempeño y con ello terminar su mandato en 2024.
“Que sigan articulándose nuestros adversarios conservadores, con todo respeto muy corruptos, porque no quieren perder sus privilegios, muy individualistas con poco humanismo por qué no les importa el otro, no les importa el prójimo, pero en fin esa manera de pensar conservadora la respetamos y respetamos el derecho a disentir”, manifestó.
López Obrador viaja a Cancún, Quintana Roo, donde iniciará una gira de siete días por la península de Yucatán para dar el banderazo a las obras de Tren Maya.
El sábado pasado el mandatario también publicó un video en el que dijo que la crisis económica mundial “no nos tumbó del todo” y México se está recuperando, por lo que pidió que el esfuerzo para sacar adelante a México sea de ricos y de pobres.
En su mensaje sabatino desde Palenque, Chiapas, expresó que el país está por entrar a una nueva fase de combate a la pandemia de COVID-19 y enfatizó que la contingencia sanitaria no ha afectado en gran medida al país.
Puntualizó aspectos positivos como la recuperación del peso, del precio del petróleo y, en especial, el incremento en la recaudación de impuestos, por lo cual agradeció a grandes corporativos que pagaron deudas al fisco por su comportamiento “ejemplar” y con “dimensión social”.
“Quiero decir que hay buenas noticias, a pesar de los pesares, a pesar de que se cayó la economía mundial por esta pandemia y también por su nivel de fragilidad, ya el modelo neoliberal, como lo he dicho en otras ocasiones, está en franca decadencia. Entonces, se cae la economía mundial, nos afecta a nosotros, afecta a los países, pero a nosotros afortunadamente no nos agarró mal parados, no nos tumbó del todo y ahí vamos, poco a poco, recuperándonos en lo económico.”, aseguró.
El presidente mostró gráficas de la apreciación del peso de 8.9%, en lo que va del actual gobierno, según los datos de ayer. Recordó que se alcanzó un peso fortalecido hasta febrero, como la moneda con mayor recuperación respecto al dólar, y luego al caer por la crisis económica superó los 25 pesos por dólar, “pero ya vamos recuperándonos poco a poco” y el viernes se ubicaba en 22.20 pesos por dólar.
También se refirió al precio del petróleo, el cual cayó hace unas semanas a menos cero y, al 29 de mayo, estaba en 28.9 dólares, “casi 30 dólares por barril”, incremento histórico en este caso porque nunca se había presentado, destacó.
Otro dato que es alentador es el de la recaudación porque “a pesar de la crisis tenemos” más de 100,000 millones de pesos más de aumento respecto al mismo periodo de enero-mayo de 2019, cuando fue de un billón 673,000 millones y en el año en curso un billón 777,000 millones, esto es, 2.8% de incremento en términos reales, explicó el mandatario.
“¿Por qué no se nos ha caído afortunadamente la recaudación? Porque se están cobrando deudas que tenían algunas empresas, corporativos y esto nos ha permitido tener ingresos para fortalecer la Hacienda Pública”, explicó López Obrador.