José Castillo, director del medio “Prioridad Máxima”, fue ultimado de varias heridas producidas con arma blanca en espalda y abdomen bajo.
Este sería el segundo asesinato de un comunicador sonorense en menos de un mes, en el municipio de Cajeme, Sonora.
Y no solo eso. Justo ayer murió otra comunicadora cajemense, en medio de una controversia, si habría perdido la vida de un golpe en la cabeza, pero los patólogos de la fiscalía sonorense dictaminaron que fue por intoxicación con monóxido de carbono y justificó que la lesión craneal de la comunicadora se debió a una “trayectoria de desplome, desde su propia altura”.
Este mismo miércoles, mientras la periodista Aurora Retes realizaba una transmisión en vivo junto al comunicador, Javier Bonillas, se escuchó la detonación de un arma de fuego y el grito de una mujer.
A la postre se supo por un informe de la fiscalía que la agresión armada tuvo lugar en la colonia Rincón del Valle y se derivó de una discusión que tuvieron dos vecinos, donde uno de ellos sacó un arma de uso exclusivo del ejército y disparó contra su opositor y huir.
Aún más. La semana pasada lanzaron un artefacto explosivo contra el automóvil del director del portal noticioso “Ciudad Obregón Sin Censura”, Marco Antonio Duarte, quien se disponía a dormir en su hogar cuando escuchó la detonación.
La organización Artículo 19 emitió una alerta para exigir al gobierno de Sonora, así como al gobierno municipal de Cajeme, a cumplir con sus obligaciones de protección y garantía de los derechos humanos, y particularmente, para el ejercicio de la libertad de expresión, debiendo generar condiciones idóneas para el desarrollo del ejercicio periodístico.
Asimismo realizó un llamado urgente a la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora y a la Fiscalía General de la República, quienes conocen los hechos, a colaborar en la investigación de los mismos, brinden medidas de protección al periodista y realicen los actos de investigación correspondientes a sus funciones para esclarecer los hechos y sancionar a los responsables.
En medio de este ambiente hostil para los comunicadores sonorenses, ocurrió el asesinato de José Castillo entre las 6:00 y 7:00 horas de este jueves.
El cuerpo sin vida quedó tendido por fuera de su vivienda en la banqueta con las extremidades inferiores ensangrentadas, así como la espalda.
Vanguardia