El organismo rector de los deportes en las secundarias de
California despojó del campeonato divisional de basquetbol a un plantel del sur
del estado porque algunos de sus jugadores arrojaron tortillas al equipo rival
de un plantel predominantemente hispano.
La Secundaria de Coronado perderá su título regional
masculino de la División 4-A debido a la “conducta denigrante y humillante” que
siguió al partido de campeonato disputado el 19 de junio, dijo la Federación
Interescolar de California en un comunicado.
Hay videos en las que al menos dos estudiantes de la
Secundaria de Coronado, predominantemente blanca, lanzan tortillas al equipo de
la Secundaria Orange Glen de Escondido después de derrotarlo 60 a 57.
El incidente siguió a una pelea entre el cuerpo técnico de
ambas secundarias, que atrajo la atención nacional y suscitó diversas
investigaciones.
La Junta Escolar Unificada de Coronado votó unánimemente por
despedir al entrenador JD Laaperi tras lo sucedido, y el supervisor de distrito
Karl Mueller emitió una disculpa pública.
Un ex alumno de la Secundaria de Coronado que proporcionó
las tortillas a los jugadores dijo que arrojarlas a los rivales era una
tradición en la Universidad de California, en Santa Barbara, donde él estudió.
Luke Serna dijo que tiene ascendencia mexicana en un 50 por ciento y señaló que
“no hubo ninguna intención racista detrás de esa acción”, reportó el periódico
San Diego Union-Tribune.
Sin embargo, la Federación Interescolar de California señaló
en un comunicado que su director ejecutivo estatal “reitera que las conductas
discriminatorias e insensibles racialmente hacia un rival contravienen los
principios del deporte en la educación”.
“En este caso, no hay duda de que el acto de arrojar
tortillas a un equipo predominantemente latino es inaceptable y merece
sanciones”, se afirma en el comunicado.
Mueller dijo que la escuela está revisando las sanciones de
la federación y decidirá si las apela.
“También hemos contratado a un investigador externo para que
examine a fondo el incidente, lo cual guiará cualquier acción correctiva
adicional”, afirmó Mueller en el comunicado.
Además de quedar vacante el campeonato regional, la junta
rectora puso a la Secundaria de Coronado bajo vigilancia los próximos tres años
escolares, y señaló que el equipo masculino de basquetbol no podrá jugar como
local partidos de postemporada a nivel seccional, regional o estatal durante
los años escolares 2022 y 2023.
Los demás equipos, administradores, deportistas,
entrenadores y directores deportivos de la escuela deben tomar un taller “sobre
espíritu deportivo” antes de que puedan ser anfitriones de competiciones de
postemporada, señaló la junta. Éste debe incluir entrenamiento para la
sensibilidad racial y cultural. Mientras que los administradores escolares y
directores deportivos deben asistir a capacitación para gestión de partidos.
La junta también recomendó que ambas secundarias trabajen
juntas para brindar a los estudiantes oportunidades de justicia restaurativa.