En medio de acusaciones de desaire del gobierno del Estado al Ejecutivo federal, y la posterior disculpa de la Secretaría de Gobernación, anoche quedó firme la visita del presidente Felipe Calderón a Yucatán, con actividades modificadas a causa del mal tiempo.
La agenda definitiva se limita a dos actos oficiales: el anuncio de una ampliación del padrón de beneficiarios del programa Oportunidades, en el gimnasio polifuncional de San José Tecoh II, y una comida con empresarios, en el Centro Siglo XXI.
Inicialmente se incluyeron actividades en lugares diferentes, pero el norte —cuyos efectos continuarían hoy—, obligó a modificar los planes.
La agenda tentativa que se conoció por la mañana consideraba la llegada del presidente Calderón alrededor de las 10 de la mañana. Del aeropuerto se trasladaría a la Unidad Deportiva Mulsay, en la colonia Ampliación Mulsay, para inaugurar su remozamiento.
Ahí mismo se anunciaría la ampliación del padrón del programa Oportunidades y tres horas más tarde el mandatario sostendría un encuentro con empresarios locales. La última actividad presidencial sería un encuentro privado.
Por la noche, aunque no había la confirmación oficial, se supo que Calderón Hinojosa anunciará la ampliación de Oportunidades en el polifuncional de San José Tecoh y ya no inaugurará la unidad deportiva.
Se habló incluso de la cancelación de la comida con los empresarios, pero más tarde se dio marcha atrás y se dijo que sí se efectuará, en el Centro de Convenciones Siglo XXI.
La gira presidencial fue motivo de nueva fricción política entre las autoridades municipales y estatales, sobre todo porque las primeras tenían, aparentemente, más información que el Ejecutivo del Estado.
“Llega el presidente mañana (por hoy jueves)”, afirmó temprano el alcalde de Mérida, César Bojórquez Zapata, quien agregó que sería para presidir eventos de Sedesol en Mérida.
“Oficialmente para mí no hay nada”, afirmó la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco cuando se le preguntó de ese tema, minutos después de la declaración del primer regidor.
Incluso la jefa del Ejecutivo dejó entrever que no participaría en la visita: “Tendríamos que ver las condiciones en que se está armando, porque tampoco pudiéramos, si es un evento con notoriedad de tintes partidistas, en la que quieran disfrazarlo como un acto de gobierno, ahí tendría que valorar mi participación (sic)”.
Sin embargo, después reveló que Luis Felipe Bravo Mena, secretario particular del Presidente, le ofreció disculpas por la forma en que se informó de la visita, sin avisarle antes, y buscaban que la organización se concretara mediante el diálogo.
Una hora después de esas declaraciones, el Ejecutivo difundió un comunicado de prensa en el que dijo que tenía conocimiento que desde el pasado domingo 21 personal del Estado Mayor trabaja con el Ayuntamiento en esta visita presidencial y se negaba “a tener al menos la cortesía de comunicarlo” a las autoridades estatales.
Entrevistado en la ceremonia del Día de la Bandera, de la que informamos en otra nota, el alcalde anunció la llegada del presidente Calderón.
Según dijo, ignoraba cuáles serían los eventos, pero tenían que ver con programas de Sedesol.
“Felipe Calderón viene sólo a Mérida, porque los meridanos son el 85% de los yucatecos con el poder económico, casi la mitad de gente, y es la zona de la metrópoli”.
Entrevistada en el mismo lugar, la gobernadora dijo que no tenía ninguna confirmación de la visita presidencial.
Al insistirle, respondió: “El día de ayer (por el martes), después del comunicado que presentó el alcalde, me comunique con Felipe Bravo, y me ofreció una disculpa por la omisión de no habernos informado”.
“Enviamos un comunicado oficial al secretario de Gobernación, con una relación de todo lo que pasó (sobre el anuncio de la visita presidencial), y que esperábamos, por la vía del diálogo, que con el gobierno estatal puedan construir la visita”.
Visita entre polémica
· Nuevo roce de la Comuna y el Ejecutivo por la gira presidencial
· Inconformidad del gobierno del Estado y disculpa federal
25/02/2010
La visita que hará hoy a Yucatán el presidente Felipe Calderón fue motivo de nueva fricción política entre el Ayuntamiento de Mérida y el gobierno del Estado.
El Ejecutivo local externó su molestia al gobierno federal porque lo habían hecho a un lado de la organización de la gira. Incluso, la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco dejó entrever que no participaría en el recorrido por esa razón.
Como consecuencia de esa protesta, el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, se comunicó con Ivonne Ortega y, según la oficina de prensa de Palacio, lamentó que no se haya seguido el protocolo de estos casos y manifestó su disposición a una coordinación efectiva.
La inconformidad del gobierno del Estado se debía a que el Ayuntamiento estaba organizando la gira, junto con la avanzada presidencial. Incluso, en la carta “de extrañamiento” que el Ejecutivo local envió al federal se utilizan expresiones como descortesía, omisión y falta de formalidad. Se hace notar también que esto ocurre “en pleno proceso electoral”.
Originalmente la Comuna solicitó datos para las acreditaciones de reporteros que cubrirán las actividades de la gira. En la noche lo hizo el Ejecutivo.