“La distinción de joven líder global 2010 que hace el Foro Económico Mundial a la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco es parte de una estrategia mediática para reposicionarla, no sólo por los últimos acontecimientos que le afectaron sino por el desgaste natural que tiene a dos años y medio de gestión”, opina Martín Echeverría Victoria, profesor de Teorías de la Comunicación e investigador de temas de Opinión Pública.
“Hay que precisar que no fue el Foro Económico el que se fijó en la gobernadora, sino que alguien la inscribió y vendió su imagen y trayectoria. Ahora sí desquitaron su sueldo sus asesores.
“Si premian su meteórica carrera política, de pasar de un cargo a otro —'aunque no terminó varios de ellos'—, bien. El premio le cayó de perlas ante el bajón que tiene”, señala.
“Pero ¿qué habría pasado si el comité evaluara su desempeño, manejo del gasto, transparencia y eficacia gubernamental?”.
“Qué diga cuáles son sus méritos”
Una investigadora censura “el obligado acarreo mediático”
06/03/2010
“Los criterios para otorgar el premio de joven líder global dicen que el candidato debe tener un logro extraordinario, haber hecho contribuciones excepcionales a favor de la sociedad y contar con un historial impecable ante el escrutinio público, pero no vemos que eso se cumpla en el caso de la gobernadora (Ivonne Ortega Pacheco)”, indica la doctora Gina Villagómez Valdés, investigadora de la Unidad de Ciencias Sociales de la Uady.
“Sería bueno, primero, que nos digan quién inscribió a Ivonne Ortega como aspirante al premio del Foro Económico Mundial y luego nos diga cuáles son sus méritos para recibir esa distinción, al menos los que hicieron creer al comité calificador”, apunta la especialista.
“Como mujer me da mucho gusto que se reconozca el trabajo de las mujeres, pero por sus méritos reales, palpables, no por sus estrategias mediáticas que sólo buscan el culto a la personalidad”, subraya la académica.
En relación con las felicitaciones de los empresarios a la gobernadora por ese premio, Gina Villagómez afirma que se trata de un “obligado acarreo mediático”, pues no les queda más que congraciarse con ella.
“Sólo así se explica que la feliciten, luego de que ella desairó a los empresarios”, indica.
Para su colega Martín Echeverría Victoria, esas felicitaciones “son parte del protocolo general y llama la atención que todos los desplegados tienen el mismo formato, sólo cambia el nombre de quien la firma”.
“Es obvio que alguien lo organizó”, apunta.
