“Miguel Sahuí Tenreiro y su padre Miguel Sahuí Peniche nos jugaron chueco”, denuncia Mónica Ivonne Baeza Collí, responsable de un grupo de vecinos de Mocochá, beneficiarios de un apoyo de $1.9 millones otorgado por la Secretaría de Fomento Agropecuario y Pesquero (Sfayp) para cultivar chile habanero en invernaderos, pero que nunca llegó a sus manos.
—Esos empresarios —añade— nos impulsaron a presentar las solicitudes de apoyo. Cuando éstas se aprobaron y salió el cheque, ellos se quedaron con todo el dinero y no hicieron nada —dice Mónica, ama de casa, vecina de la comisaría de Tekat.
En entrevista, Sahuí Tenreiro reconoce que él y su padre son “socios de los vecinos de Tekat”.
“Pusimos nuestra parte: dos hectáreas de terreno en comodato, la asesoría para realizar los trámites ante la Sfayp y la promesa de darles trabajo a las mujeres en el invernadero. La gente de Tekat se dedicaría a producir chile y nosotros a venderlo”, señala.
El dinero del proyecto se hizo efectivo a mediados de 2009, agrega. “Los cheques salieron a nombre de las beneficiarias; ellas lo cobraron, pero nos entregaron el dinero porque así se estipula en las reglas de operación de esos apoyos”. Nosotros, explica, “además de ser sus socios —por la aportación del terreno— somos sus proveedores, porque construiríamos los invernaderos”.
Según Sahuí Tenreiro, éstos no se han construido “porque estamos en espera de que la gente de Tekat reciba otros apoyos para la siembra del chile”.
Sahuí, socio de un restaurante de tacos y sin antecedentes en la industria de la construcción de invernaderos, afirma que no recuerda cuánto dinero recibió de la Secretaría ni en qué lo gastó. “El dinero está en una cuenta bancaria a mi nombre. Si me dan algunos días daré toda la información: el banco, el número de cuenta y el monto. El que nada debe, nada teme”, dijo.
El Diario esperó al señor Sahuí tres semanas, pero éste nunca entregó los datos que prometió.
—Cuando la gente de Tekat reciba otros apoyos de la Sfayp para la siembra de chile habanero, haremos los invernaderos. El dinero sigue allí, esperando —afirma Miguel Sahuí Tenreiro.
Sin embargo, Mónica Baeza Collí y María de Jesús Nahuat Baeza, responsables de dos grupos de beneficiarios con apoyos de la Sfayp, quienes, como hemos publicado, no recibieron un solo peso de esas asignaciones, dicen que esos grupos ya no existen.
—Se formaron al vapor, nadie se conocía entre sí. De los once integrantes de mi grupo —señala Mónica— únicamente conocía a mi mamá.
—Por todo lo que ha pasado —añade— pido a las autoridades que me desliguen de esos proyectos, porque no quiero más problemas.
María de Jesús confirma la inexistencia de esos grupos: “Se lo dije a un inspector de la Secretaría a mediados de 2009, cuando me preguntó por los invernaderos. 'No sé nada', le respondí, 'todo lo vieron los Sahuí'”.
Sahuí Tenreiro, cabeza visible de los beneficiarios reales de esos apoyos oficiales, carece de experiencia en la agricultura y en la construcción de invernaderos, aunque él asegura que está en la lista de proveedores de ese servicio, registrada en el gobierno.
Actualmente es socio del restaurante La Carbonera, especializado en tacos, y antes manejó el vídeo bar Club de la 56. También tiene un puesto administrativo en el Centro Educativo Latino.
Sahuí Peniche es jubilado del IMSS y directivo de la organización Pacto Ciudadano, cercana al PRI y presidido por José D. López y López. Fue presidente del Consejo Electoral del Distrito I con cabecera en Mérida, en los comicios de 1987, 1990 y 1993.