Noticias de Yucatán
Entre los planes estaba expropiar tierras en Chichén
09/05/2010
Desde el inicio de su gestión, el gobierno de Ivonne Ortega Pacheco preveía la expropiación de los terrenos de la zona arqueológica de Chichén Itzá, no su compra, como se anunció recientemente.
Según el documento “Yucatán exitoso, el camino al futuro”, redactado por la Secretaría de Planeación y Presupuesto (SPP) en 2008, el gobierno busca aprovechar la designación de Chichén Itzá como una de las siete nuevas maravillas del mundo moderno, para convertir esa zona en la capital del Mundo Maya y crear un circuito turístico en su alrededor, que genere empleos permanentes y bien remunerados.
Para lograr ese propósito, el documento establece claramente que es necesaria la “culminación del proceso de expropiación de la zona arqueológica de Chichén Itzá y la delimitación de otras zonas arqueológicas ubicadas en el circuito”.
Como publicamos, el director de Cultur, Jorge Esma Bazán, confirmó que ese organismo compró 83 hectáreas de la zona arqueológica en $230 millones, a Hans Jürguen Thies Barbachano, propietario de las tierras.
Esma dio a entender que la operación, que se sufragará con créditos bancarios, había sido ampliamente ventajosa para Yucatán porque el propietario pedía dos tantos más por esa superficie de terreno.
Una posibilidad Hasta antes de la compra de Cultur, el gobierno federal, como informamos, seguía considerando la posibilidad de expropiar las tierras de Chichén, indemnizando al propietario con $8.1 millones (luego se habló de $18 millones), que equivaldría al valor del predio, según el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales.
El director de Cultur explicó que los $230 millones que se pagaron a Thies Barbachano se fijaron por un avalúo realizado por un corredor público, que aún no ha sido identificado.
Ni Esma Bazán ni otro integrante del gobierno han explicado las razones para cambiar la decisión de expropiar, establecida en un documento oficial, por la de comprar.
Circuito turístico En ese documento se advierte también que el gobierno impulsará la creación de un circuito turístico alrededor de Chichén, no sólo con la expropiación de sus tierras, sino con la modernización de las carreteras que conforman el circuito Mérida-Valladolid-Tizimín y la conexión del aeropuerto de Chichén Itzá, con otros puntos de interés del Mundo Maya.
En materia de carreteras el gobierno local y federal amplían desde 2009 la carretera libre, en los tramos Valladolid-Xcan y Chemax-Cobá, y hay planes de hacer lo mismo en el tramo Valladolid-Chichén.
Según el documento “Yucatán exitoso, el camino al futuro”, redactado por la Secretaría de Planeación y Presupuesto (SPP) en 2008, el gobierno busca aprovechar la designación de Chichén Itzá como una de las siete nuevas maravillas del mundo moderno, para convertir esa zona en la capital del Mundo Maya y crear un circuito turístico en su alrededor, que genere empleos permanentes y bien remunerados.
Para lograr ese propósito, el documento establece claramente que es necesaria la “culminación del proceso de expropiación de la zona arqueológica de Chichén Itzá y la delimitación de otras zonas arqueológicas ubicadas en el circuito”.
Como publicamos, el director de Cultur, Jorge Esma Bazán, confirmó que ese organismo compró 83 hectáreas de la zona arqueológica en $230 millones, a Hans Jürguen Thies Barbachano, propietario de las tierras.
Esma dio a entender que la operación, que se sufragará con créditos bancarios, había sido ampliamente ventajosa para Yucatán porque el propietario pedía dos tantos más por esa superficie de terreno.
Una posibilidad Hasta antes de la compra de Cultur, el gobierno federal, como informamos, seguía considerando la posibilidad de expropiar las tierras de Chichén, indemnizando al propietario con $8.1 millones (luego se habló de $18 millones), que equivaldría al valor del predio, según el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales.
El director de Cultur explicó que los $230 millones que se pagaron a Thies Barbachano se fijaron por un avalúo realizado por un corredor público, que aún no ha sido identificado.
Ni Esma Bazán ni otro integrante del gobierno han explicado las razones para cambiar la decisión de expropiar, establecida en un documento oficial, por la de comprar.
Circuito turístico En ese documento se advierte también que el gobierno impulsará la creación de un circuito turístico alrededor de Chichén, no sólo con la expropiación de sus tierras, sino con la modernización de las carreteras que conforman el circuito Mérida-Valladolid-Tizimín y la conexión del aeropuerto de Chichén Itzá, con otros puntos de interés del Mundo Maya.
En materia de carreteras el gobierno local y federal amplían desde 2009 la carretera libre, en los tramos Valladolid-Xcan y Chemax-Cobá, y hay planes de hacer lo mismo en el tramo Valladolid-Chichén.