- A partir de agosto se verá un aumento de los casos en el Estado
- Los Servicios de Salud trabajan para evitar males mayores
“Lo peor del dengue está por venir”, alertó Álvaro Quijano Vivas, secretario de Salud estatal.
Explicó que a partir de la semana 38 del calendario se registra un marcado aumento de los casos de la enfermedad, pero la época crítica comienza desde finales de agosto por el aumento en las lluvias. Hasta ahora hay 607 casos confirmados de enfermos de dengue, de los cuales 270 son del tipo hemorrágico y el resto, del clásico. El 50% de las personas afectadas por el dengue son de Mérida, la mayoría vive en Francisco de Montejo y en la zona de los Vergeles.
El doctor Salvador Gómez Carro, subdirector de Salud de los SSY, precisó que en octubre del año pasado en una sola semana hubo 625 casos de dengue.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud en tan sólo la última semana se disparó el número de enfermos a causa de la plaga de moscos que afecta a la población. “La plaga se ha extendido por todo el Estado, no hay un solo lugar donde no sufran por los moscos”, indicó el doctor Gómez Carro.
Se pasó de 10 casos a la semana a 25; es decir, hubo un aumento del 150 por ciento.
Gómez Carro indicó que Kanasín es uno de los focos rojos por la gran cantidad de agua acumulada, principalmente en los baches, y por la maleza, donde se forman grandes criaderos de moscos. En las últimas semanas se han registrado varios casos de dengue en esa ciudad.
“El problema de Kanasín es su deficiencia en los servicios públicos”, apuntó.
A su vez, el doctor Quijano Vivas dijo que la Secretaría de Salud realiza fumigaciones en todo el Estado en coordinación con los ayuntamientos y se eliminan criaderos de mosquitos. La finalidad es tratar de evitar que los casos de enfermos de dengue se disparen. “Esperamos un repunte (de la enfermedad) en las próximas semanas, pero tomamos medidas para evitar mayores problemas”. El funcionario recomendó ayudar a eliminar los criaderos de mosquitos, para lo cual hay que cambiar de manerea constante el agua de floreros, bebederos y fuentes, y voltear o tapar recipientes en los patios.
Entre las acciones que se llevan al cabo para combatir al mosco transmisor del dengue, ayer por la mañana se puso en marcha una campaña emergente de descacharrización con un ejército de 400 personas.
PROGRESO.— La temporada veraniega arrancó con una plaga de moscos en la costa, lluvias como la que se registró ayer, ocasionadas por líneas de vaguada y ondas tropicales; problemas en los servicios públicos, como el abasto de agua potable por fallas en la presión, y deficiencias en la recolección de basura.
A esos problemas se suma el de la limpieza matutina de la playa y la avenida del malecón, punto de concentración de numerosos visitantes y de familias que acostumbran desde temprano caminar en esa zona turística.
En las dos últimas semanas se externaron quejas por la basura acumulada en la playa del malecón, en especial los lunes porque la limpieza se inicia tarde, aunque el director de Servicios Públicos, Mauricio González de la Rosa, aseguró que se barre a partir de las cinco de la mañana.
Prohibición Paseantes y prestadores de servicios esperan que ahora que aumenta la afluencia vacacional la limpieza se haga temprano, sobre todo al final de la avenida, donde viernes y sábados un tramo de 200 metros se convierte en cantina al aire libre y amanece con botellas de licor y cerveza.
La alcaldesa María Ester Alonzo Morales aseguró que desde ayer sábado el Ayuntamiento prohibió el consumo de bebidas alcohólicas en el malecón a partir de las siete de la noche.
En la zona del malecón hay pocos baños públicos para atender a los miles de paseantes que llegan los domingos, pues los restaurantes sólo permiten su uso a sus clientes.
A lo largo del malecón hay tres negocios que rentan baños y regaderas: uno es un puesto de venta de playeras, el otro una rentadora de camastros y expendio de refrescos. Uno más está en la zona de playa cercana al viaducto de arcos. Por el servicio cobran $5, pero son insuficientes dado el número de visitantes que llegan al puerto.
En el mercado y la estación de camiones de la ruta Mérida-Progreso también hay baños.
Pese a que fueron reubicados con sus triciclos frente al andador del malecón, los vendedores de marquesitas, elotes y granizados no dejan de ser un problema en esta temporada, porque ahora el espacio para estacionamiento y paso de vehículos es aún menor.
La recolección de basura es otro servicio que se presta con deficiencias en el puerto porque, en opinión de los temporadistas, no llega a la zona veraniega, así que se ven obligados a dejar sus bolsas con desperdicios en los basureros que se habilitan en las carreteras de Chicxulub, Chelem y Chuburná, de modo que hay contaminación ambiental y visual todo el día.
José Luis Baqueiro del Valle, quien tiene su casa de verano entre Chicxulub y Uaymitún, dijo que en el área veraniega no hay buen servicio de recolección de basura; los recolectores no llegan con regularidad a esa parte del puerto, así que los visitantes llevan sus bolsas de desperdicios hasta el basurero habilitado a la entrada de Chicxulub.
Cuando el recolector llega a las casas veraniegas, si le pagan en ese momento se lleva la basura, pero a veces sólo está el velador del predio y, como no le pueden pagar, no presta el servicio.
En opinión de Baqueiro del Valle, si el recolector del puerto no puede dar el servicio, que la autoridad lo concesione o deje un camión en la entrada de Chicxulub, donde haya una persona que cobre por las bolsas de basura y una vez lleno el depósito haga el traslado.
En Chelem y Chuburná no hay servicio de recolección de basura en la zona veraniega, pero desde hace varios años hay basureros a la vera de la carretera, donde la gente lleva sus desperdicios.
A los temporadistas les cobran una cuota que va de $5 y hasta $20, dinero que se debe emplear para sueldo del encargado del tiradero y traslado de la basura al relleno sanitario, pero no se hace, de modo que el lugar siempre está lleno de desperdicios.
Problemas con el agua Otro asunto es el servicio de agua potable; aunque el nuevo director del Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado, cirujano dentista Enrique Castro Cruz, afirmó que está garantizado el abasto del vital líquido en el puerto y en la zona veraniega, lo cierto es que hay problemas en el suministro por fallas en la presión.
Los fines de semana, cuando hay ocupación de predios veraniegos, se observa que baja la presión y hay horas en que se deja de recibir el líquido. El domingo pasado se recibieron reportes de que en la zona veraniega de Yucalpetén, numerosas casas se quedaron sin agua potable, incluso se vaciaron las cisternas, hubo familias que tuvieron que comprar “pipas” para abastecerse.
—Estamos trabajando para garantizar un buen servicio de agua durante las vacaciones, los equipos están en buenas condiciones, hay guardias para atender quejas y personal que labora en la reparación de fugas —aseguró Enrique Castro.
También hay problemas en el servicio eléctrico, dada la demanda de electricidad en los puertos donde se instalan la feria y numerosos negocios, como restaurantes y discotecas instalados a lo largo de la zona veraniega.
También hay apagones a cualquier hora del día o de la noche, que duran de uno a cinco minutos, lo que causa problemas tanto a visitantes como a vecinos de los puertos.
