De acuerdo con datos obtenidos, las quejas han llegado hasta la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco. Los conflictos laborales llegarían hasta los tribunales porque hay despidos injustificados que se atribuyen a la directora y a un reducido grupo de colaboradores.
Elefante blanco
En reclusorio femenil, como informamos hace unas semanas, se ha convertido en un "elefante blanco", porque a pesar de tener una estructura administrativa y operativa no alberga a ninguna interna. Su construcción, en la que se emplearon más de 100 millones de pesos, terminó hace mucho tiempo.
Se ignoran las causas por las cuales ese centro de reclusión no funciona, a pesar de que a diario hay un evidente dispendio de recursos en ese lugar. Por ejemplo, más de medio centenar de empleados acuden a diario sólo para cumplir con sus horarios, pues todavía no tienen labores que cumplir.
Aún así, los conflictos laborales son constantes y se sabe de varios escritos enviados a la jefa del Ejecutivo en los que los afectados piden que se les haga justicia. Acusan directamente a la directora del reclusorio, Gabriela Figueroa Balam, de propiciar el enfrentamiento entre "superiores e inferiores".
En sus tres años de "funcionamiento" ese Cereso femenil ha registrado muchas "bajas de empleados" e incluso del personal de confianza. Ya no tiene la plantilla inicial a pesar de que los primeros empleados recibieron cursos para laborar en ese sitio.
Se desconoce si los escritos enviados a la gobernadora Ivonne Ortega han dado algún resultado o si se ha iniciado alguna investigación.
Por reglamento, las relaciones sentimentales están prohibidas, sin embargo, según las denuncias recibidas, se han dado varios casos, incluso de niños nacidos de esa circunstancia.
En los escritos dirigidos a la jefa del Ejecutivo se menciona a varios funcionarios y empleados de confianza que habrían hostigado a sus subalternos.
Arrestos arbitrarios
Por ejemplo, Yolanda Rejón, Luz Molina, Mario Noh, Raúl López, etcétera, cuyos puestos no se han precisado.
También se habla de arrestos arbitrarios: los empleados castigados no pueden abandonar el reclusorio por determinado tiempo a pesar de terminar sus labores.- Rudesindo Ferráez García
El reclusorio femenil de Mérida está vacío y no se debe a la falta de mujeres delincuentes.
No funciona
A pesar de los recursos empleados, un total de $101 millones, en sus instalaciones todavía no funciona como tal.
Dinero tirado
Esos recursos, provenientes de los impuestos ciudadanos, todavía no rinden frutos a la sociedad. Al contrario, la obra es más onerosa porque se paga un equipo administrador, de vigilancia, servicios, etcétera.