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Respecto a la economía mexicana en general, un reporte del IMEF presentado en la rueda de prensa, dice que aquella "presenta una evolución más favorable que la prevista" y se espera que vendrá una expansión.
Esa calificación positiva se basa en seis factores: en el primer trimestre de este año el Producto Interno Bruto creció más del 5%, lo cual consolida la recuperación económica; la inflación se mantiene en el rango previsto a pesar del alza en las gasolinas y las materias primas internacionales, y el peso se revaluó en más del 5.5% respecto al dólar.
Además, el petróleo mexicano se vende a 50 dólares el barril, mucho más de lo previsto; en el primer trimestre se acumularon 600 millones de dólares adicionales en la reserva internacional, y el financiamiento al sector privado evoluciona positivamente, aunque todavía es modesto en proporción al PIB.
Otra señal del avance económico del país es el "Indicador IMEF", que elabora ese instituto con base en encuestas que realiza entre sus socios. En febrero era de 52.7 , y en marzo subió a 54.1, cantidades favorables pues un índice superior a 50 puntos muestra que hay crecimiento.
"El indicador predice que el sector manufacturero experimentará un nuevo brote de dinamismo en los próximos meses, y actualmente este se ubica en su nivel más elevado desde abril de 2007", se agrega.
El instituto citado considera que hay elementos para revisar al alza las cifras macroeconómicas del país que se tenían hasta el mes pasado.
El PIB crecería de 4.1 a 4.3 por ciento, la inflación anual será de 3.9% y el tipo de cambio bajará de $12.25 a $12.19. La tasa de interés crecerá de 4.50 a 4.63.
En este año aumentará el empleo, se crearían 620,000 plazas en vez de las 600,000 calculadas inicialmente.
Riesgos
El IMEF también advierte de ciertas contigencias que podrían afectar esos pronósticos, como los conflictos políticos en diferentes partes del mundo que afectarían al precio del petróleo, y la situación económica de Japón, en particular el sector automotriz.
También figuran el déficit fiscal de Estados Unidos, un problema que ya propició que las calificadoras internacionales adviertan sobre una perspectiva negativa en la deuda de ese país, y la inseguridad en diversas zonas del territorio mexicano que entorpecen el crecimiento y la inversió
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