Noticias de Yucatán
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Queja contra un funcionario por varias anomalías
Profesores del sistema preescolar de educación indígena se quejan del presunto favoritismo, entre otras irregularidades, de Wílbert Dzul Canul, director de Educación Preescolar, al asignar contratos.
Desde agosto pasado decenas de educadores del sistema preescolar indígena esperan por horas cerca de la oficina del funcionario, sólo para ver que gente sin el perfil requerido, con la “palanca” adecuada, obtiene los contratos para laborar en el interior del estado, según denuncian los profesores.
Muchos de los educadores viajan todos los días de sus lugares de origen a Mérida, sólo para regresar con las manos vacías, comentan.
Según comentan, tiene particular predilección por estudiantes de la Universidad Pedagógica Nacional, a quienes otorga contratos sin tomar en cuenta a quienes están en lista de espera de acuerdo a su promedio.Además, añaden, para trabajar en ese nivel se necesita ser licenciado en Educación Preescolar titulado y los beneficiados que proceden de la UPN aún no concluyen su carrera.La mayoría de los quejosos viaja de lunes a viernes desde su comunidad de origen y se instala en los pasillos de la sede la Secretaría de Educación estatal en espera de que les toque un contrato, aunque sea lejos de su pueblo.Por la noches regresan a su casa sin trabajo y con la esperanza de tener mejor suerte al día siguiente.Los inconformes señalan que Dzul Canul es prepotente en su trato a los educadores, además de que mira con lascivia a maestras más jóvenes.-Estamos hartas de que nos esté “morboseando” -dice una joven educadora.Añaden que otros profesores le llevan frutas y viandas al funcionario, con tal de obtener un trabajo. También ha pedido, dicen, cartas de recomendación de diputados o alcaldes del PRI.
Queja contra un funcionario por varias anomalías
Miércoles, 10 de octubre de 2012 - Edición impresa
Según los inconformes, dicho funcionario no respeta la lista de inscritos al examen de Ceneval para asignar los contratos a los educadores y favorece a sus allegados, recomendados y a quien le lleve regalos.
-Esto ha sido así desde hace cinco años, nos tiene todo el día esperando y no nos atiende ni nos da trabajo, ¿para esto estudiamos tanto? -afirma una de las quejosas, quienes pidieron conservar el anonimato por temor a represalias de Dzul Canul.
Los inconformes agregan que cada año varios licenciados en Educación Preescolar se inscriben y presentan un examen Ceneval para tener acceso a una plaza.
De todos los aspirantes, los 40 mejores promedios obtienen una plaza; los restantes, también por orden de promedio, deberían obtener un contrato en alguna escuela fuera de Mérida, pero, a decir de los quejosos, luego de que los primeros 40 obtienen su plaza, Dzul Canul no respeta la lista de los que siguen en promedio y otorga contratos a recomendados o allegados.
