MÉRIDA, Yuc.- La depresión es una de las 10 enfermedades más incapacitantes en Yucatán: quienes la padecen pierden en promedio 25.51 días de trabajo al año, mucho más elevado que los 6.8 días promedio que dejan de laborar los pacientes con enfermedades crónico degenerativas no psiquiátricas como: diabetes, hipertensión y artritis, de acuerdo con cifras de la delegación estatal del Instituto Mexicano del Seguro Social.
Y es que, de acuerdo con datos del Colegio de Psicólogos de Yucatán, un aspecto palpable de la depresión en Yucatán es el liderazgo en cuanto a la tasa de suicidios: la tasa local es de 8.6 por cada 100 mil habitantes, lo que duplica el 4.9 por ciento a nivel nacional. En 2015 hubo 120 suicidios en la entidad.
“La depresión se caracteriza por un síntoma principal: la tristeza. Muchas personas tienen ese estado de ánimo que aparentemente es su forma normal de vida y no representa problemas, pero hasta que no ocurre un evento estresante como una pérdida, no es tomada en cuenta”, señaló el doctor Luis Jorge Gamboa Albornoz, del departamento de enseñanza, investigación y capacitación de la Subdirección Mental de la Secretaría de Salud de Yucatán (SSY).
Agregó que el ser humano es el único ser sobre la tierra que se colapsa y que, cuando esto ocurre, pierde la esperanza, lo que muchas veces deriva en el suicidio.
“Cuando existe un cuadro depresivo muchas veces se acompaña de problemas de adicciones, las cuales son un detonante para que se tomen decisiones en muchas ocasiones fatales, como suicidarse”, mencionó el psiquiatra.
Explicó que las adicciones son solo un síntoma de que “algo está pasando” con la persona, ya que detrás de una adicción hay algo doloroso, normalmente un duelo no resuelto, depresión o ansiedad que propicia que la persona quiera desconectarse de la realidad.
Luis Jorge Gamboa Albornoz señaló que los grupos etarios a los que más afecta la depresión son entre 15 y 25 años porque intentan comprender el mundo con las problemáticas que se les presentan: estudiar, trabajar, tener una pareja, hijos, entre otros y por otra parte los mayores de 60 años porque ya no se sienten útiles para la sociedad sobre todo cuando a esa edad aún requieren trabajar y no son contratados por las empresas.
Cabe señalar que la enfermedad puede llegar a ser crónica o recurrente al punto de dificultar el desempeño en el trabajo, escuela y la capacidad para afrontar la vida diaria, y, en su forma más grave, como se mencionó, puede conducir al suicidio.
Si es clasificada como leve, se puede tratar sólo con terapia, pero cuando se le considera moderada o grave es necesario tratarla con medicamentos y psicoterapia profesional, sin embargo, el doctor Gamboa Albornoz hizo énfasis en la necesidad de trabajar en la psicoeducación que consiste en enseñar al afectado y a su familia en que consiste el trastorno, qué características tiene y que se puede hacer para mejorarlo.
“Los medicamentos no lo son todo, es necesaria una mejor comunicación entre padres e hijos y entre las personas en general. El ver, escuchar y sentir se ha perdido. Las personas actualmente tienen una gran necesidad ser escuchadas y sentir que son importantes para su familia. Hay que recuperar la sensibilidad. El trato humano, el respeto y la educación son el camino”, concluyó.
Claves
Afecta en su mayoría mujeres: en 2015, se presentaron en Yucatán 1,469 casos de depresión, ocho de cada diez casos fueron de féminas
El 13 de enero de cada año se celebra el “Día Mundial de la Lucha contra la Depresión”, un mal que afecta cada vez a un mayor número de personas.
Y es que, de acuerdo con datos del Colegio de Psicólogos de Yucatán, un aspecto palpable de la depresión en Yucatán es el liderazgo en cuanto a la tasa de suicidios: la tasa local es de 8.6 por cada 100 mil habitantes, lo que duplica el 4.9 por ciento a nivel nacional. En 2015 hubo 120 suicidios en la entidad.
“La depresión se caracteriza por un síntoma principal: la tristeza. Muchas personas tienen ese estado de ánimo que aparentemente es su forma normal de vida y no representa problemas, pero hasta que no ocurre un evento estresante como una pérdida, no es tomada en cuenta”, señaló el doctor Luis Jorge Gamboa Albornoz, del departamento de enseñanza, investigación y capacitación de la Subdirección Mental de la Secretaría de Salud de Yucatán (SSY).
Agregó que el ser humano es el único ser sobre la tierra que se colapsa y que, cuando esto ocurre, pierde la esperanza, lo que muchas veces deriva en el suicidio.
“Cuando existe un cuadro depresivo muchas veces se acompaña de problemas de adicciones, las cuales son un detonante para que se tomen decisiones en muchas ocasiones fatales, como suicidarse”, mencionó el psiquiatra.
Explicó que las adicciones son solo un síntoma de que “algo está pasando” con la persona, ya que detrás de una adicción hay algo doloroso, normalmente un duelo no resuelto, depresión o ansiedad que propicia que la persona quiera desconectarse de la realidad.
Luis Jorge Gamboa Albornoz señaló que los grupos etarios a los que más afecta la depresión son entre 15 y 25 años porque intentan comprender el mundo con las problemáticas que se les presentan: estudiar, trabajar, tener una pareja, hijos, entre otros y por otra parte los mayores de 60 años porque ya no se sienten útiles para la sociedad sobre todo cuando a esa edad aún requieren trabajar y no son contratados por las empresas.
Los síntomas
“La depresión es un trastorno mental frecuente que se caracteriza por la presencia de la tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración”, explica el especialista en salud mental.Cabe señalar que la enfermedad puede llegar a ser crónica o recurrente al punto de dificultar el desempeño en el trabajo, escuela y la capacidad para afrontar la vida diaria, y, en su forma más grave, como se mencionó, puede conducir al suicidio.
Si es clasificada como leve, se puede tratar sólo con terapia, pero cuando se le considera moderada o grave es necesario tratarla con medicamentos y psicoterapia profesional, sin embargo, el doctor Gamboa Albornoz hizo énfasis en la necesidad de trabajar en la psicoeducación que consiste en enseñar al afectado y a su familia en que consiste el trastorno, qué características tiene y que se puede hacer para mejorarlo.
“Los medicamentos no lo son todo, es necesaria una mejor comunicación entre padres e hijos y entre las personas en general. El ver, escuchar y sentir se ha perdido. Las personas actualmente tienen una gran necesidad ser escuchadas y sentir que son importantes para su familia. Hay que recuperar la sensibilidad. El trato humano, el respeto y la educación son el camino”, concluyó.
Claves
Afecta en su mayoría mujeres: en 2015, se presentaron en Yucatán 1,469 casos de depresión, ocho de cada diez casos fueron de féminas
El 13 de enero de cada año se celebra el “Día Mundial de la Lucha contra la Depresión”, un mal que afecta cada vez a un mayor número de personas.