“A partir de este martes, la Dirección de la Policía Preventiva Municipal de Saltillo suspendió a la elemento Diana Laura Charles Álvarez por irregularidades en su desempeño”, informó la presidencia municipal a través de un boletín de prensa.
Las anomalías en las que presuntamente incurrió la oficial las aduce a que esta semana trascendió en redes sociales una videograbación en la que aparece parte de la detención de una mujer cuando estaba dentro de la patrulla, (hecho que fue grabado y difundido sin su autorización).
Gabriela “N”, quien aseguró vivir en residencial San Patricio, fue aprehendida el sábado a las dos de la madrugada, debido a que andaba ebria y siguió tomando una cerveza a bordo de un auto de alquiler, cuyo conductor pidió el apoyo de la policía. Cuando los oficiales iban a detenerla la muchacha los agredió y hasta le mordió un dedo a uno de ellos, se resistió al arresto, aseguró ser sobrina del presidente municipal y exigió a gritos “háblenle a mi tío Chilo”. De nada le sirvió presumir que tenía influencias pues estuvo 36 horas detenida en la comandancia de la Policía Municipal.
“La instrucción del alcalde es que el ciudadano tenga siempre sus garantías a salvo, por lo cual se velará permanentemente”, remarca la versión oficial en el comunicado.
Por considerar que fue víctima de una detención arbitraria y que se vulneraron sus garantías individuales porque resultó afectada por la difusión del video, la joven presentaría una queja ante la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Coahuila (CDHEC) y el Ministerio Público (MP) del fuero común, de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE). La madre de Gabriela aseguró que su hija fue golpeada por cuatro policías cuando estuvo detenida en la comandancia y afirmó que hay testigos de ello. Sin embargo no presentó ningún certificado médico para probar su dicho.
