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Casi nadie te dice cuándo lavar toallas, sábanas y tapetes, quizá porque no preguntas.
Una de las primeras lecciones que da mamá, si decides salir de casa, es la forma en que debes lavar la ropa: blanca por un lado, de color por otra, la interior aparte.
Pero, ¿cada cuánto hay que lavar las sábanas, las toallas, los edredones, las almohadas, los tapetes y demás artículos que solo piensas en cambiar cuando huelen mal o están muy sucios?
A continuación, una lista con explicaciones breves que te servirán para tener una casa más limpia.
Lo mejor de estos consejos de la app de lavandería y tintorería a domicilio Mr Jeff es que, a diferencia de científicos y madres, no son radicales, sino adaptados a las nuevas generaciones.
Sábanas
A más sudor, más lavadas.
Las sábanas hay que cambiarlas una vez a la semana, pero ninguna persona en la actualidad puede estar cambiándolas tan seguido, por ello debes tener en cuenta el contexto.
Si te bañas antes de dormir y no hace mucho calor por las noches, lava las sábanas una o dos veces al mes.
Pero si duermes con alguien y no siempre se ponen la pijama, pues sí mejor cámbialas cada 7 a 10 días.
Toallas
Las toallas deben lavarse cada cuatro usos, pero esta regla no es consecuente con los millennials.
La clave con las toallas es que las dejes secar bien, de lo contrario, empezarán a oler a humedad y se te pegará en la piel.
Entonces, si las extiendes después de bañarte y se secan bien, puedes lavarlas cada 15 días.
Edredones
Importa el uso que le des. Si solo está para que tu cama luzca bien y casi nunca entra en contacto con tu piel, olvídate de él y lávalo dos veces al año.
Pero si te da por comer en la cama, o comprar pizza para ver series, quizá una lavada trimestral será necesaria.
Almohadas
Las fundas de las almohadas debes lavarlas con las sábanas.
Primero, porque la cabeza siempre suda al dormir, y si no las lavas juntas, tendrás un collage de colores en la cama.
Las almohadas, sin embargo, pueden esperar mucho más, cada tres o seis meses, como los edredones.
Cortinas y tapetes
Es posible que nunca notes que las cortinas y los tapetes de la casa necesitan limpiarse, hasta que tu madre te lo diga en una visita sorpresa.
Mejor lava ambas cosas una vez al año, máximo dos, dependiendo de la cantidad de polvo que entre a tu departamento.
Casi nadie te dice cuándo lavar toallas, sábanas y tapetes, quizá porque no preguntas.
Una de las primeras lecciones que da mamá, si decides salir de casa, es la forma en que debes lavar la ropa: blanca por un lado, de color por otra, la interior aparte.
Pero, ¿cada cuánto hay que lavar las sábanas, las toallas, los edredones, las almohadas, los tapetes y demás artículos que solo piensas en cambiar cuando huelen mal o están muy sucios?
A continuación, una lista con explicaciones breves que te servirán para tener una casa más limpia.
Lo mejor de estos consejos de la app de lavandería y tintorería a domicilio Mr Jeff es que, a diferencia de científicos y madres, no son radicales, sino adaptados a las nuevas generaciones.
Sábanas
A más sudor, más lavadas.
Las sábanas hay que cambiarlas una vez a la semana, pero ninguna persona en la actualidad puede estar cambiándolas tan seguido, por ello debes tener en cuenta el contexto.
Si te bañas antes de dormir y no hace mucho calor por las noches, lava las sábanas una o dos veces al mes.
Pero si duermes con alguien y no siempre se ponen la pijama, pues sí mejor cámbialas cada 7 a 10 días.
Toallas
Las toallas deben lavarse cada cuatro usos, pero esta regla no es consecuente con los millennials.
La clave con las toallas es que las dejes secar bien, de lo contrario, empezarán a oler a humedad y se te pegará en la piel.
Entonces, si las extiendes después de bañarte y se secan bien, puedes lavarlas cada 15 días.
Edredones
Importa el uso que le des. Si solo está para que tu cama luzca bien y casi nunca entra en contacto con tu piel, olvídate de él y lávalo dos veces al año.
Pero si te da por comer en la cama, o comprar pizza para ver series, quizá una lavada trimestral será necesaria.
Almohadas
Las fundas de las almohadas debes lavarlas con las sábanas.
Primero, porque la cabeza siempre suda al dormir, y si no las lavas juntas, tendrás un collage de colores en la cama.
Las almohadas, sin embargo, pueden esperar mucho más, cada tres o seis meses, como los edredones.
Cortinas y tapetes
Es posible que nunca notes que las cortinas y los tapetes de la casa necesitan limpiarse, hasta que tu madre te lo diga en una visita sorpresa.
Mejor lava ambas cosas una vez al año, máximo dos, dependiendo de la cantidad de polvo que entre a tu departamento.
Fuente: El universal