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El padre de la menor utilizó Facebook como herramienta para rastrear a su hija. La red social fue la ruta para dar con quienes pretendían prostituirla.
La familia comenzó su preocupación cuando la niña no llegó a casa.
Empezamos a buscar en redes sociales, en WhatsApp, en Facebook, a las amigas.
Y exactamente fueron las redes sociales las que le dieron la pista principal para dar con su amada hija.
“Seguimos a una compañera de clases sobre la cual sospechábamos y empezamos a ver que tenía publicaciones, que ofrecía su cuerpo y que hacía fotos muy sugestivas en ropa interior”.
Una de las publicaciones de la compañera invitaba a reunirse con ella y una “amiga” y ahí comenzó el presentimiento de que esta niña podría saber dónde estaba su hija, informó El Tiempo.
Tras continuar siguiendo las redes de la menor, encontró un número telefónico, sin dudar marcó y concretó una cita.
Me dice que tiene una amiguita nueva y me cita en la calle 22 con carrera 14 en una esquina donde hay una bomba de gasolina.
En medio de su preocupación, el hombre acudió al lugar de la cita y observó como dos niñas se dirigían al lugar, una de ellas, su hija.
“Me puse nervioso y me escondo; espero a que me den la espalda, pero se iban a subir a un taxi y entonces las cogí con la mano, abrazo a mi hija, y en ese momento salen tres tipos”.
Rápidamente subió con su hija al vehiculo en el que llegó, en medio de insultos por parte de los sujetos.
Su carita era irreconocible. Sus ojos eran unos pimpones, me imagino que lloró demasiado.
Las autoridades informaron que su hija había sido drogada, mientras la menor confesó que había sido invitada a “encuentros” en los que obtendría dinero y no necesitaría estudiar.
La familia de la menor no entiende cómo cayó en esta red de prostitución, aseguran que no le falta nada y es muy tranquila.
Tenía dos días sin saber en ella, utilizó las redes sociales para rastrearla y se hizo pasar por un clienteColombia.- Su hija de 13 años de edad desapareció sin motivo alguno. El lunes 7 de Mayo fue la última vez que conocieron su paradero, ella tomó la unidad que la llevaría al colegio y ahí comenzó el rastreo de su padre que concluyó con la ubicación de una red de prostitución.
El padre de la menor utilizó Facebook como herramienta para rastrear a su hija. La red social fue la ruta para dar con quienes pretendían prostituirla.
La familia comenzó su preocupación cuando la niña no llegó a casa.
Empezamos a buscar en redes sociales, en WhatsApp, en Facebook, a las amigas.
Y exactamente fueron las redes sociales las que le dieron la pista principal para dar con su amada hija.
“Seguimos a una compañera de clases sobre la cual sospechábamos y empezamos a ver que tenía publicaciones, que ofrecía su cuerpo y que hacía fotos muy sugestivas en ropa interior”.
Una de las publicaciones de la compañera invitaba a reunirse con ella y una “amiga” y ahí comenzó el presentimiento de que esta niña podría saber dónde estaba su hija, informó El Tiempo.
Tras continuar siguiendo las redes de la menor, encontró un número telefónico, sin dudar marcó y concretó una cita.
Me dice que tiene una amiguita nueva y me cita en la calle 22 con carrera 14 en una esquina donde hay una bomba de gasolina.
En medio de su preocupación, el hombre acudió al lugar de la cita y observó como dos niñas se dirigían al lugar, una de ellas, su hija.
“Me puse nervioso y me escondo; espero a que me den la espalda, pero se iban a subir a un taxi y entonces las cogí con la mano, abrazo a mi hija, y en ese momento salen tres tipos”.
Rápidamente subió con su hija al vehiculo en el que llegó, en medio de insultos por parte de los sujetos.
Su carita era irreconocible. Sus ojos eran unos pimpones, me imagino que lloró demasiado.
Las autoridades informaron que su hija había sido drogada, mientras la menor confesó que había sido invitada a “encuentros” en los que obtendría dinero y no necesitaría estudiar.
La familia de la menor no entiende cómo cayó en esta red de prostitución, aseguran que no le falta nada y es muy tranquila.
