Noticias de Yucatán. Noticias de Hoy
Esta vez el tamaño sí importó. El escenario de la premiere mundial de “Ant-Man y la Avispa” dominó la vista de cualquier transeúnte del Hollywood Boulevard, con una carpa monumental, una alfombra roja de la longitud de los premios Óscar y una estructura de cartón de las dimensiones de un edificio de tres pisos asomándose con la figura del personaje del cómic al que Paul Rudd vuelve a dar vida este verano.
“Me siento como si caminara en los pasillos de la Comic-Con, con toda esta gente caracterizada de superhéroes”, expresó un jovial y bromista Rudd, ante decenas de seguidores caracterizados de Ant-Man y la Avispa.
“Para mi papel tuve que cuidar mucho mi peso, comer bien, hacer mucho ejercicio y ponerme en la línea de pensamiento de una hormiga”, expresó Rudd.
“Ant-Man y la Avispa” es la película número 20 del Universo Cinematográfico Marvel, que sucede inmediatamente después de los eventos de “Capitán América: Civil War” (2016), con un Scott Lang (Rudd) que debe pagar por infringir la ley, por una parte queda bajo arresto domiciliario y también lejos de su traje especial que lo vuelve del tamaño de un insecto o de un gigante.
“Llevábamos tiempo con el deseo de seguir explorando estos personajes. Una vez más Scott está en una situación de confinamiento por sus acciones, aunque ahora está distanciado también de Hope (Evangelina Lilly) y su padre y mentor Hank Pym (Michael Douglas), quienes no vieron con muy buenos ojos que se fuera a Europa a pelear al lado de los Avengers, dejándolos atrás”, explicó Rudd, luciendo un traje gris, muy apropiado para el verano.
La aventura dirigida por Peyton Reed, realizador de la original “Ant-Man” (2015), catapulta al frente a la Avispa, alter ego de Hope, para permear la cinta en un sentido femenino.
El corazón de la producción tiene que ver con la búsqueda de Janet van Dyne (Michel Pfieffer) —madre de la protagonista— a quien se trata de rescatar de la dimensión subatómica del Quantum Realm.
“Me gusta que la película subraye los valores de la familia. En mi caso, Scott tiene de motor el amor a su hija Cassie (Abby Ryder Forston), quien siempre busca lo mejor para él y por lo tanto lo motiva a ser una mejor persona. Yo también tengo una hija pequeña y créeme que sé mucho de jugar con Barbies, además de dejarme sorprender por su ingenio y humor”, compartió Rudd esbozando una sonrisa paterna.
A la premiere mundial asistieron además de los protagonistas y director, el actor Mario López, el compositor Michael Giacchino y el actor de “Baywatch” y “El auto increíble”, David Hasselhoff. Resaltó el vestido plateado de gala de Evangeline.
Las salas del teatro El Capitán y el Teatro Chino fueron ocupadas en su totalidad por los invitados de Disney y Marvel. Fuente:Eluniversal