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Esta práctica, pese al repudio de la comunidad internacional, es protegida por Dinamarca
Dinamarca.-En una bahía del Atlántico, el agua se tiñó roja de sangre cuando los aldeanos masacraron a cientos de ballenas en las Islas Feroe.
Los espectadores contaron cómo los animales chillaron de terror después de que los pescadores los condujeran a la tierra firme antes de matarlas en las playas.
Niños de hasta cinco años ayudaron a los sanguinarios pescadores de Sandavágura utilizar cuerdas enganchadas para atraer a las ballenas hacia su muerte.
El estudiante de la Universidad de Cambridge Alastair Ward, de 22 años, se topó con el baño de sangre mientras celebraba su graduación.
Pensamos que sería una sola arrastrada, pero cada vez más barcos aparecían en el horizonte.
Los isleños han llevado adelante la brutal cacería durante siglos, en preparación para los crudos meses de invierno donde las condiciones de vida se complican considerablemente. La carne de las ballenas es salada o cortada en bistecs, mientras que la grasa es fileteada y consumida cruda.
No podía creer cuántas ballenas había. Las estaban conduciendo a la bahía, empujándolos con sus remos. Una vez que se acercaron lo suficiente, toda la ciudad entró corriendo y comenzó a acuchillarlas, dijo el estudiante.
"Incluso los niños se involucraban, tiraban de las cuerdas y saltaban sobre los cadáveres". "Simplemente nos quedamos sentados sin palabras y un poco molestos, pero no podías alejarte".
"No murieron de una manera muy humana. "Muchos de los locales estaban diciendo que es lo mismo que cultivar, pero no podía confiar en eso.
"Los niños estaban saltando sobre ellos. "Simplemente tienen una actitud tan diferente para nosotros porque se les menciona".
Esta práctica, pese al repudio de la comunidad internacional, es protegida por Dinamarca
Dinamarca.-En una bahía del Atlántico, el agua se tiñó roja de sangre cuando los aldeanos masacraron a cientos de ballenas en las Islas Feroe.
Los espectadores contaron cómo los animales chillaron de terror después de que los pescadores los condujeran a la tierra firme antes de matarlas en las playas.
Niños de hasta cinco años ayudaron a los sanguinarios pescadores de Sandavágura utilizar cuerdas enganchadas para atraer a las ballenas hacia su muerte.
El estudiante de la Universidad de Cambridge Alastair Ward, de 22 años, se topó con el baño de sangre mientras celebraba su graduación.
Pensamos que sería una sola arrastrada, pero cada vez más barcos aparecían en el horizonte.
Los isleños han llevado adelante la brutal cacería durante siglos, en preparación para los crudos meses de invierno donde las condiciones de vida se complican considerablemente. La carne de las ballenas es salada o cortada en bistecs, mientras que la grasa es fileteada y consumida cruda.
No podía creer cuántas ballenas había. Las estaban conduciendo a la bahía, empujándolos con sus remos. Una vez que se acercaron lo suficiente, toda la ciudad entró corriendo y comenzó a acuchillarlas, dijo el estudiante.
"Incluso los niños se involucraban, tiraban de las cuerdas y saltaban sobre los cadáveres". "Simplemente nos quedamos sentados sin palabras y un poco molestos, pero no podías alejarte".
"No murieron de una manera muy humana. "Muchos de los locales estaban diciendo que es lo mismo que cultivar, pero no podía confiar en eso.
"Los niños estaban saltando sobre ellos. "Simplemente tienen una actitud tan diferente para nosotros porque se les menciona".