A 8 años de cárcel fue sentenciado Víctor Manuel N., luego de ser encontrado culpable de delitos contra los animales mediante actos de crueldad. Los dueños de Deck, un perro de raza Akita, dijeron que el 25 de noviembre de 2020, salieron de paseo a un parque ubicado en las calles Victoria y Progreso de la colonia Guadalupe Hidalgo, de la ciudad de Puebla, donde soltaron a su mascota.
Víctor Manuel N., se acercó al perro y lo lesionó en diferentes ocasiones con un objeto punzocortante. Deck fue trasladado a una veterinaria donde fue intervenido quirúrgicamente, sin embargo, su salud siguió deteriorándose y días después murió. La Fiscalía General del Estado identificó y detuvo al agresor quien fue vinculado a proceso al existir los elementos suficientes para determinar su culpabilidad.
Las pruebas fueron consideradas determinantes durante la audiencia realizada el pasado 23 de abril: tras casi 10 horas el colectivo Abogados Animalistas de Puebla obtuvo sentencia condenatoria en lo que fue el primer juicio oral en Puebla por delitos contra los animales.
Esta semana, en la individualización de la sentencia, el Tribunal de Enjuiciamiento lo sentenció a 8 años de prisión que cumplirá en un Cereso de Puebla, y deberá pagar 47 mil 500 pesos por daño material y 21 mil 720 pesos como pago de la reparación del daño moral.
El Movimiento Animalista de Puebla, que buscaba una pena máxima de 12 años de prisión, celebró el fallo condenatorio y dijo que la abogada María Esther Martínez Gil, integrante del colectivo "Abogados Animalistas de Puebla" logra esta primera sentencia por delito contra los animales en su modalidad de crueldad animal en el primer juicio oral 145/2023 del estado de Puebla y segundo a nivel nacional.
Maltrato animal en México
En el país el primer caso en el que se llegó a juicio oral y se obtuvo sentencia condenatoria ocurrió en Querétaro por el asesinato de Athos y Tango, dos perros que fueron envenenados en 2021.
Sobre el maltrato animal, Ericka Escalante Izeta, coordinadora de la Maestría en Desarrollo Humano de la IBERO Puebla, ha dicho que “está siendo recurrente que en Puebla y en municipios aledaños haya casos de maltrato animal”.
Escalante Izeta identifica que estos casos van desde agresiones extremas “con golpes, machetazos” o cuestiones normalizadas como tenerlos amarrados en azoteas. Agrega que el maltrato animal también puede ser una señal de alerta: “en el ciclo de la violencia se suele comenzar por los seres más vulnerables, que en este caso serían perros, después niños, adultos mayores, hasta llegar a adultos (…) por eso es muy importante denunciar a quien atenta contra un perro o un gato, para evitar el riesgo de tener a un delincuente viviendo entre nosotros”.
