CALIFORNIA.- Un exmaestro de escuela secundaria en California fue sentenciado a 17 años y medio de cárcel federal por grabar en secreto a niños con cámaras ocultas instaladas en los baños escolares.
¿Qué sucedió?
El martes 10 de septiembre, las autoridades anunciaron que Siu Kong Sit, de 38 años, exdocente de la Escuela Secundaria Beckman en Irvine, California, enfrentará una condena severa por su conducta inaceptable.
Además de la sentencia de prisión, se le ordenó estar bajo supervisión de por vida tras su eventual liberación.
El fiscal de la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos para el Distrito Central de California declaró lo siguiente:
Siu Kong Sit, quien es un exmaestro en Beckman High School en Irvine, Calif., se declaró culpable en marzo de un cargo de posesión de material de abuso sexual infantil. Como parte de su acuerdo de culpabilidad, Sit admitió ‘poseer conscientemente imágenes y videos de menores de 12 años participando en conductas sexuales’”.
Cámaras ocultas y explotación
Todo comenzó en febrero de 2020, cuando Sit empezó a instalar cámaras ocultas en los baños del campus de Beckman High School.
Regularmente revisaba los videos y descargaba aquellos que le parecían “de interés”.
Su conducta no se detuvo allí: en mayo de 2022, mientras trabajaba como entrenador del equipo de robótica de la escuela, colocó una cámara oculta en el baño de una habitación de hotel en Texas donde se alojaban estudiantes menores de edad para un torneo.
Durante un período de tres años, desde 2020 hasta 2023, Sit visualizó y descargó cientos de imágenes de niños y adultos en diversas etapas de desnudez mientras usaban los baños.
¿Cómo se dieron cuenta de los videos?
En febrero de 2023, las autoridades descubrieron las cámaras ocultas y confiscaron múltiples dispositivos y unidades de almacenamiento de cámaras en la casa de Sit en Rowland Heights, California.
La búsqueda reveló “docenas de imágenes y videos” de material de abuso sexual infantil, incluyendo a niños en situaciones comprometedoras mientras usaban el baño.
Los fiscales enfatizaron que las víctimas grabadas por Sit no habían dado su consentimiento y que algunos de ellos eran menores de 12 años.
Además, se encontraron pruebas perturbadoras en un disco duro propiedad de Sit: al menos 22 imágenes y un video de “un niño pequeño involucrado en actividad sexual” y otras 150 imágenes y cuatro videos de material de abuso sexual infantil.
Mensaje de cero tolerancia
El fiscal Martin Estrada declaró:
Este acusado fue la pesadilla de todos los padres: en lugar de cuidar la seguridad y el bienestar de los estudiantes, los explotó de la manera más abominable. Es importante que enviemos un mensaje contundente de cero tolerancia para aquellos que se aprovechan de los niños. Mi oficina continuará procesando a los infractores que atentan contra nuestra juventud hasta el máximo permitido por la ley”.
Además de su condena federal, Sit también enfrentará cargos penales en la Corte Superior del Condado de Orange relacionados con las víctimas adultas grabadas por las cámaras ocultas.
