1. “Yo no soy machista ni feminista, yo creo en la igualdad”
Lo primero que deberías hacer es regalarle un diccionario para que busque el significado de feminismo y vea que se está contradiciendo a sí mismo. Según la RAE, feminismoes una ideología que defiende que las mujeres deben tener los mismos derechos que los hombres.
Así que, además de recomendarle que se documente un poco antes de expresar su opinión, recuérdale que lo opuesto a machismo es hembrismo y no feminismo. Y aunque le resulte muy complicado de entender, sí amigo, los hombres pueden ser feministas también.
2.- “No le hagas caso, debe estar en esos días del mes”
Seguro que esta frase la has oído tanto por parte de hombres como de mujeres. Es cierto que sufrimos cambios hormonales y que los dolores producidos por la regla pueden hacer que estemos de peor ánimo pero, ¿en serio crees que es una excusa para no tomarnos en serio?
Es totalmente absurdo, la menstruación no afecta a nuestro razonamiento. Por favor, no fomentes este tipo de pensamiento, si tienes un día torcido no le eches la culpa a la regla.
3.- “Si eres así no vas a conseguir novio”
Después de reírte por lo absurdo que suena que en los tiempos que corren el objetivo de una mujer sea conseguir novio, puedes preguntarle a qué se refiere cuando dice “ser así”. Porque por lo general se refieren a las mujeres independientes que expresan libremente su opinión y hacen lo que les da la gana. Lo que está claro es que una persona “así” nunca tendrá de novio a un hombre que dice esas cosas, básicamente porque valora su libertad.
4.- “No deberías sentirte ofendida cuando te dicen un piropo por la calle, ¿a quién lo le gusta sentirse guapa?”
Primero, ¿quién te ha pedido tu opinión? A ver si se creen que nos vestimos cada mañana con la intención de que nos suelten alguna barbaridad por la calle. Estamos seguras que no les resultaría tan gracioso si la situación fuera con su madre, su mujer, su hermana o su hija. La próxima vez que te ocurra, si te sientes con el valor suficiente, puedes responderles con un corte de mangas o decirles que te importa más bien poco lo que te haría si te “pillara”.
5.- “Uno de los privilegios que tienen las mujeres es que pueden entrar gratis a las discotecas”
¿Privilegio? ¿En serio? ¿Te parece un privilegio que nos traten como trozos de carne? ¿Qué seamos un reclamo para que vayan más hombres a la discoteca como si eso significara que pueden liarse con nosotras? O todavía más fuerte, fiestas en las que las mujeres que no llevan ropa interior entran gratis. POR FAVOR, por respeto a ti misma, no fomentes este tipo de eventos en los que no te tratan como a una persona sino como a cebo para peces.
6.- ¿Dónde está el jefe?”
“El jefe” dando por supuesto que es un hombre y no una mujer. Y lo peor, cuando se lo preguntan a la jefa y tiene que decir: no, si la jefa soy yo. Aún está instaurado en algunas mentes que la figura de la mujer es la de secretaria del director.
7.- “Los hombres son racionales y las mujeres emocionales”
Claro, los hombres no lloran y las mujeres no sabemos resolver nuestros problemas. Estamos hartas ya de oír hablar del “sexo débil” y de ser las “princesas que necesitan ser salvadas de la torre custodiada por un dragón”. Todos somos personas, y el ser racional o emocional no va ligado al género de cada uno. Que no te cuenten cuentos, la princesa fue la que mató al dragón y se quedó esperando a que llegara el príncipe.
8.- “La maternidad es crucial en la realización de la mujer”
Esto es lo que nos han intentado hacer creer durante siglos pero no es cierto. Algunas mujeres tienen esa necesidad y otras no, depende de cada una. No se puede decir que todas las mujeres necesiten ser madres para ser felices, cada persona es un mundo y cada uno tiene aspiraciones diferentes. De igual modo hay hombres que también les gustaría ser padres para sentirse realizados.