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(SinEmbargo).- “Han sido los días más terribles de toda mi vida; no sé si exista un dolor más grande que el ver perdido a un hijo, a una hija”, describe Gerardo Herrera Serrano, padre de Itzel Areli Herrera Zúñiga, adolescente desaparecida desde el 20 de octubre en la entonces Delegación Cuauhtémoc de la Ciudad de México.
La pasada Navidad fue la más triste para la familia Herrera, ante la ausencia de la chica de 16 años de edad. Sin embargo, no pierden las esperanzas de encontrarla y que ella tenga cobijo donde quiera que esté.
“Itzel, hija mía, feliz Noche Buena y Feliz Navidad, que Dios te cuide, te guíe y te alumbre el camino de sabiduría y amor. Dios te de cobijo, ponga un pan en tu mesa donde quiera que te encuentres. Recuerda que mientras más oscura sea la noche es señal que pronto amanecerá y tendrás frente a ti un brillante y esplendoroso sol. Te extraño mucho, hija mía. Le doy gracias a Dios por darme la dicha de tener una hija como tú, me siento orgulloso de ser tu padre, gracias mi amor.. Seguiré buscándote hoy y siempre (sic)”, escribió su padre en su muro de Facebook el pasado 25 diciembre.
Iztel Areli estudia en la Vocacional 13 del Instituto Politécnico Nacional (IPN). Es una chica extrovertida, muy alegre y con muchas ambiciones, describe su padre en entrevista con SinEmbargo.
“Le gusta el ballet, tener amigas y amigos, como cualquier jovencita de su edad; quería aprender muchas cosas, divertirse, crecer y estudiar”, comenta el señor Herrera.
En una reciente manifestación, en donde familiares de mujeres desaparecidas en la Ciudad de México exigieron a las autoridades capitalinas acelerar las investigaciones, Gerardo Herrara sostiene que como familiar no quiere pelear con las autoridades sino solucionar el problema. Lo único que quiere es que sean escuchados.
INVESTIGACIONES LENTAS
Itzel desapareció el 20 de octubre de 2018 cuando acudió a una fiesta a unas dos cuadras de su casa, ubicada en la colonia San Simón Tolnáhuac, en la hoy Alcaldía de Cuauhtémoc en la Ciudad de México.
Su padre detalla que ella se presentó a la fiesta alrededor de las 8 de la noche y la última hora que la vieron fue alrededor de la 1 de la mañana, “se suponía que ella saldría de la fiesta rumbo a su casa, pero no llegó a su hogar”.
La joven, de 1.59 metros de estatura, tez blanca y cabello quebrado oscuro, portaba una blusa color negro con un dibujo color blanco y un mallón negro, detalla la ficha de la Alerta Amber.
La familia, al notar su ausencia, inició una búsqueda con los amigos, conocidos y otros parientes. Esperaron alrededor de ocho días para interponer la denuncia formal con la esperanza que estuviera con algún allegado, comenta el padre.
Las investigaciones se han centrado en la zona y el punto donde fue vista por última vez. Su padre no quiso ahondar en detalles del día de la desaparición y la indagatoria para no entorpecerla, dice. No obstante, el hombre refiere que la indagatoria se estancó por el cambio de Gobierno.
“Lamentablemente nos tocó la transición de poderes y se ha estado retrasando un poco, pero tenemos mucha fe que se van a retomar las investigaciones con el nuevo Gobierno”, comenta.
La joven lleva más de dos meses desaparecida y hasta el momento no hay indicios de su paradero.
“Siguen las investigaciones por parte de la Fiscalía Especializada, antes CAPEA. Las autoridades han estado haciendo su trabajo. Al momento de la desaparición, nosotros como padres quisiéramos que regresara al instante, ya conforme han pasado los días me doy cuenta que son procesos largos [las investigaciones]. Eso es lo que tenemos que arreglar como sociedad y como autoridades que se hagan los procesos de protocolo mas cortos e inmediatos.
El grupo de trabajo conformado para el análisis de la Alerta de Violencia de Género en la Ciudad de México ha detectado diversas omisiones por parte de la autoridad ministerial en la investigación de desaparición de mujeres en la Ciudad de México, de acuerdo con un informe emitido en abril pasado.
Durante la visita a las instalaciones de CAPEA, ahora Fiscalía Especializada, el grupo de trabajo confirmó que “el personal no asocia la desaparición de menores de edad a la comisión de algún ilícito y sí con la existencia de violencia familiar; ahí no se hizo referencia al Protocolo para la Búsqueda de Personas ni al procedimiento ahí establecido”.
SinEmbargo solicitó a la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJ-CdMx) detalles sobre el número de denuncias y casos que actualmente investigan como desaparición forzada de mujeres. Pero la autoridad no ha dado respuesta a esa petición.
Gerardo Herrera Serrano se dice un hombre institucional, por lo que confía en que la justicia hará su trabajo.
“Yo creo en las instituciones, creo que el Gobierno que está entrando [el que preside Claudia Sheinbaum Pardo], yo sé que nos van escuchar y nos va a ayudar. Hay buena voluntad”, reitera.
En un mensaje a la sociedad destaca que está convencido que hay “buenas personas” y agradece las muestras de solidaridad en la búsqueda de su hija.
“Somos una sociedad donde sí, existe la maldad… pero sé que también existe el bien, veo que hay empatía, yo sé que como juntos como sociedad podremos resolver esto”, dice el padre.
La familia no pierde la esperanza de hallar pronto a Itzel. “Hija mía, mi niña linda, te extraño mucho… se fuerte, cree en ti, nunca pierdas la esperanza y ten mucha fe en Dios… te vamos a encontrar… (sic)”, escribe Gerardo a su hija desde su cuenta en redes sociales.
