Vecinos de la colonia San Antonio Xluch III, que viven en extrema pobreza y marginación, piden al presidente del Congreso estatal, Mauricio Sahuí Rivero, que cumpla sus promesas de campaña.
En la colonia ubicada al sur de la ciudad habitan familias con elevado número de hijos, cuyos padres obtienen salarios muy bajos. Los habitantes aún practican el fecalismo al aire libre, no tienen calles y mucho menos servicios de recolección de basura y transporte público.
En cuanto al agua y la luz, dicen que gestionaron esos servicios con la ayuda de la anterior administración municipal.
Los habitantes aseguran que durante su campaña política para asumir su actual cargo el presidente del Congreso local, Mauricio Sahuí Rivero, visitó esa zona y se dio cuenta de las condiciones en que habitaban.
"El diputado Mauricio nos prometió que mejoraría la colonia y que construiría nuestras calles, pero sólo obtuvo su triunfo y se olvidó de nosotros; ahora nadie me ayuda, ni la gobernadora Ivonne Ortega mucho menos la alcaldesa Angélica Araujo, ya que también se le ha solicitado ayuda", dice Ernestina García, quien lleva dos años viviendo en esos terrenos que les dio el Instituto de Vivienda de Yucatán (IVEY), los cuales en breve comenzarán a pagar.
En una de las casuchas vive con sus cuatro hijos Idalia de Mena, quien pide ayuda a las autoridades para poder darles de comer a sus pequeños, pues con el sueldo que percibe su esposo no les alcanza.
Lucía Alejandra Patrón Pinzón, otra de las habitantes de la zona, señala que debido al exceso de maleza que les rodea hay personas extrañas que ingresan a esa zona entre las brechas y que sólo se dedican a merodear sus endebles casas cuando las mujeres se quedan solas con sus hijos, pues sus maridos salen a trabajar desde muy temprano y no regresan, sino hasta la tarde.
Otro problema en ese sitio es que uno de los habitantes de nombre Juan, quien presume que el IVEY le dio dos terrenos, metió varios camiones para desmantelar; sin embargo, dicen las vecinas, los trabajadores de Juan les ofrecen a las niñas y a los niños 250 pesos a cambio de que les hagan algunos "favorcitos".
Las mujeres temen que sus hijas e hijos sean atacados sexualmente, por lo que piden vigilancia policiaca.
"Ya nos cansamos de ir a pedir ayuda a las autoridades y por eso decidimos publicar en qué condiciones vivimos", dicen las mujeres.- Martha Dzul Chan; martha.chan@megamedia.com.mx
Vea en el sitio en internet del Diario un vídeo del recorrido que hizo la reportera por la colonia San Antonio Xluch III, en el Sur
