Empleados del Ayuntamiento de Mérida señalaron que no tienen fecha de entrega.
Por otro lado, de manera extraoficial se informó que a fin de este mes comenzará un plan de rescate de los corredores y locales del parque de Santa Lucía.
El proyecto de restauración, según se informó extraoficialmente, fue elaborado por estudiantes de la Facultad de Arquitectura, quienes propusieron darle un uso turístico a los locales, convirtiéndolos en restaurantes, tiendas de artesanías y negocios de giro similar.
Los sitios más deteriorados son la arcada y los corredores, ya que las paredes tienen suciedad, telarañas, y residuos de humedad provocada por el agua que se filtra a través de los techos, parte de los cuales ya se derrumbó.
La ex Estación Central y el parque de Santa Lucía presentan serios deterioros por el olvido:
Santa Lucía
Los efectos del descuido y del transcurso del tiempo son visibles en sus corredores y locales.
La ex Estación
Hubo algunos derrumbes en las antiguas bodegas y otros edificios del lugar.
Supervisores de esa labor indicaron que no tienen fecha para terminar esa tarea, tampoco saben el ritmo de avance que hay por día porque este varía de tramo en tramo por las disparidades del terreno.
En el recorrido también se vio que ya se cortaron casi todos los árboles y la maleza, pero falta retirar las ramas, troncos, hojas y otros desperdicios.
Parte de los rieles continúan semi ocultos por la basura, y siguen en pie diversas estructuras de concreto y metal que servían para el movimiento y control necesarios para la entrada y salida de los convoyes.
En los patios y antiguos andenes aún hay estacionados carros de carga, cisternas y góndolas inservibles. Son cerca de 100 piezas con partes herrumbrosas y pintadas con graffitis.- Hansel Vargas Aguilar
El acondicionamiento de la vieja ex Estación Central, sus patios de maniobras y los alrededores marcha a ritmo lento.
Los árboles y maleza
Con el corte de árboles y maleza es más visible el daño que tienen las antiguas bodegas y otros edificios de la estación. En unos casos hubo derrumbe total, y en otros se vino abajo el techo o alguna pared. En muros y techumbre que siguen en pie hay tramos que amenazan también con caerse.
Los andenes
Los andenes son una zona de peligro. El techo es una estructura metálica que ya perdió gran parte de sus láminas, y muchas de las que siguen ahí pueden caerse debido a que algunas de sus partes están fuera de su sitio. El viento que las sacude produce un ruido intenso.
Después de décadas de abandono que ocasionaron derrumbes en partes de sus techos, los corredores del parque de Santa Lucía y sus locales contiguos serán restaurados.
Según información extraoficial, el propietario del predio ya tiene autorización del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para hacer las reparaciones. Sólo falta que la Comuna emita el permiso de construcción respectivo.
Al parecer, estudiantes de la Facultad de Arquitectura de la Uady elaboraron la propuesta de rescate y la reutilización de ese inmueble abandonado: los locales serían acondicionados para ofrecerlos en renta o venta, a fin de instalar ahí restaurantes, cafés, tiendas de artesanías, librerías y otros comercios enfocados al turismo.
Desde hace varios años el parque de Santa Lucía es sede todos los jueves de serenatas. Esta circunstancia y su ubicación ocasiona que sea visitado por turistas de todo el tiempo.
Los daños en la arcada y los corredores son más visibles durante el día: las paredes tienen suciedad, telarañas, excremento de palomas y humedad causada por el agua de lluvia que se filtra por los techos.
Estos lugares dan acceso a varios locales cerrados, espacios protegidos contra miradas extrañas por puertas igualmente dañadas: tienen agujeros y parches con maderos.
Sus rendijas dejan ver las condiciones del interior: basura y techos derrumbados, lo que también se puede constatar a través de imágenes de Google Earth, que muestran lo que serían unos doce locales, de los cuales cuatro tenían desprendimientos en sus techos cuando se tomaron las fotografías satelitales.
Detrás de estos espacios se observa un gran patio.
Uno de estos sitios, el que da a la calle 60, es utilizado como bodega. En un tiempo estuvieron llenos con butacas de cine.
Según se averiguó, antes de que concluya el mes empezaría la primera etapa de restauración, que será en los corredores. Después serán los locales.
El lugar cuenta con vigilancia y tiene vallas metálicas para impedir el paso a los corredores, pero pocos respetan esa restricción.