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(carreteras, obras mal hechas)
(carreteras, obras mal hechas)
Se reduce el paso y hay piedras en la vía, por Valladolid Publicada: 12 septiembre 2011
La ampliación de la carretera libre Valladolid-Cancún representa un peligro, entre otras cosas, porque ya se formó un escalón 
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VALLADOLID.- La ampliación de la carretera libre federal Mérida-Cancún en los tramos Valladolid-Pisté y Catzín-Xcán pone en riesgo a los conductores por las piedras que las constructoras dejan a la orilla de la vía.
Hace cuatro meses que se inició el trabajo en el tramo Valladolid-Pisté, luego de concluirse el tramo Chemax-Cobá-Valladolid.
En las partes en construcción se ha dejado un carril para que puedan circular los vehículos.
Durante un recorrido por el lugar se observó que hay varios parajes, sobre todo entre Cuncunul y Kaua, donde el escombro se desparrama sobre la angosta vía donde transitan los vehículos. Hay piedras tiradas en el pavimento.
Además, hay hondonadas en las orillas del encarpetado, de tal modo que si algún conductor se descuida puede sufrir un serio accidente.
Florentino Caamal, único velador de la empresa Terrasur, una de las tres encargadas de los trabajos, dice que antes era más peligroso.
-Por lo menos ahora en la mayoría de los tramos ya se le tiró escombro, aunque aún hay partes hondas. Por fortuna no ha habido accidentes.
Por las noches, cada una de las empresas, Terrasur, Lusen y Nómada, instalan sus respectivas señales a fin de evitar algún percance.
Los 42 kilómetros se dividieron en las tres compañías y cada una trabaja en cuatro kilómetros y luego avanza.
Por ahora sólo una pequeña parte que va de Valladolid a Ebtún está casi lista, pero el resto hasta el kilómetro 140, es decir entre Cuncunul y Kaua, aún falta mucho por hacer para terminar los trabajos.
Otro recorrido en las mismas circunstancias es el de Catzín-Xcan, donde incluso los conductores tienen que circular unos 5 kilómetros "a vuelta de rueda".
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Hace cuatro meses que se inició el trabajo en el tramo Valladolid-Pisté, luego de concluirse el tramo Chemax-Cobá-Valladolid.
En las partes en construcción se ha dejado un carril para que puedan circular los vehículos.
Durante un recorrido por el lugar se observó que hay varios parajes, sobre todo entre Cuncunul y Kaua, donde el escombro se desparrama sobre la angosta vía donde transitan los vehículos. Hay piedras tiradas en el pavimento.
Además, hay hondonadas en las orillas del encarpetado, de tal modo que si algún conductor se descuida puede sufrir un serio accidente.
Florentino Caamal, único velador de la empresa Terrasur, una de las tres encargadas de los trabajos, dice que antes era más peligroso.
-Por lo menos ahora en la mayoría de los tramos ya se le tiró escombro, aunque aún hay partes hondas. Por fortuna no ha habido accidentes.
Por las noches, cada una de las empresas, Terrasur, Lusen y Nómada, instalan sus respectivas señales a fin de evitar algún percance.
Los 42 kilómetros se dividieron en las tres compañías y cada una trabaja en cuatro kilómetros y luego avanza.
Por ahora sólo una pequeña parte que va de Valladolid a Ebtún está casi lista, pero el resto hasta el kilómetro 140, es decir entre Cuncunul y Kaua, aún falta mucho por hacer para terminar los trabajos.
Otro recorrido en las mismas circunstancias es el de Catzín-Xcan, donde incluso los conductores tienen que circular unos 5 kilómetros "a vuelta de rueda".
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