Noticias de Yucatán
Mérida es una de las ciudades más seguras del país, pero hay indicios de que las cosas podrían empezar a cambiar, advierten expertos en seguridad nacional.
De 2011 a 2013, por ejemplo, creció 42 por ciento la incidencia delictiva en el Estado, principalmente por el aumento en el robo y la extorsión, dice Roberto Gregorio Banuet Marín, investigador de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), que realiza un estudio sobre seguridad y violencia en el Sureste.
—Este dato muestra que algo está cambiando, pero otro dato que lo confirma y que al menos a mí me alarma —dice— es la reciente aparición en Yucatán de grandes bandas de golpeadores a sueldo, auspiciadas, supongo por el mismo gobierno y su aparato policiaco.
—Una primera actuación de esas bandas la vimos el día de las elecciones en Temax, donde dos pandilleros murieron al tratar de reventar los comicios a favor del PRI, con un zafarrancho.
—Estos vándalos volvieron a aparecer, ahora encapuchados y armados con palos, en una gasolinera de Progreso, para atemorizar a los vecinos inconformes con su apertura y más recientemente, otra vez encapuchados, agredieron a una mujer en Conkal, inmiscuida en un lío ejidal.
Futuros Zetas
—Ojo —dice Banuet Marín, entrevistado en esta ciudad—, este es el caldo de cultivo de lo que serán los futuros Zetas de Yucatán.
El investigador advierte también que la percepción ciudadana sobre la alta seguridad en Mérida ha empezado a erosionarse. Según la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (Envipe), del Inegi, en 2011, ocho de cada 10 yucatecos mayores de 18 años se sentía seguro en el Estado. En 2013, esta percepción bajó al 70%
En este mismo sentido se expresa la experta en temas de seguridad nacional Ana María Salazar Slack, subsecretaria Adjunta de Defensa para Política y Apoyo Antidrogas del Departamento de Defensa de los Estados Unidos en 1998, quien participó como ponente en el VI Foro Económico Empresarial del IMEF, celebrado el martes en esta ciudad.
En su intervención en ese evento, la especialista recomendó no confiarse de que Mérida es una ciudad segura, “porque puede volverse insegura en cualquier momento como ocurrió en Guadalajara”.
Salazar Slack expuso cinco razones para explicar el actual nivel de seguridad de Mérida, en un contexto nacional donde ocurre todo lo contrario. Estas son: razones geográficas, la alta capacitación de la policía, adiestrada para enfrentar bandas altamente potentes, y el desinterés de los criminales por Mérida. También puede haber razones económicas, dice. Por ejemplo, que el gobierno federal haya decidido proteger a Mérida, como lo hace con Cancún, y como no lo ha hecho con Acapulco.
Otra razón sería que Mérida es segura porque está bajo control de una sola organización criminal, lo que evita el conflicto.
—Como sea —añade la especialista— el tema es que no hay que confiarse. Mérida es una ciudad segura y ojalá siga así, pero este es un momento privilegiado para crear instituciones sólidas y fuertes contra el robo y la extorsión y contra lo que vendrá después.
Crimen multinacional
—Y esto es así por una sencilla razón: Mérida no puede quedar exenta de la ola criminal que pasa por todo el país. El crimen funciona como una empresa multinacional, lo que sucede en alguna ciudad de Tabasco, de Guerrero o de Colombia, por ejemplo, afecta a otras, aparentemente desconectadas, porque la delincuencia es multinacional.
Para Banuet Marín, un dato duro que muestra este cambio en la condiciones de seguridad, es que en 2011, el último dato disponible, 20,026 empresas yucatecas, el 27.5% del total, declaró haber sufrido por lo menos un delito en sus instalaciones, principalmente actos de corrupción, robo y extorsión, según la Envipe de ese año.
—Esto ocasionó pérdidas por $389 millones en ese año y un gasto en sistemas de seguridad empresarial de $654 millones, además de crear una percepción de inseguridad en el 37 por ciento de los encuestados.
—A este dato se le añade, como ya dijimos —explica Banuet Marín— que el índice de incidencia delictiva en Yucatán aumentó 42 por ciento entre 2011 y 2013 debido, sobre todo, al incremento del robo (este delito está presente en todos los municipios), y la extorsión.
—Esto ha disparado el miedo, lo que explica la colocación de medidas de protección en el 39% de los hogares yucatecos que, a su vez, significaron un costo de $1,768 millones, en 2013.
Sin embargo, a juicio del investigador de la Flacso, un dato positivo que asoma en la Envipe es que pese a ese panorama, más del 60% de los yucatecos confía en la policía local y el 88% percibe a la corporación como dispuesta siempre a prestar ayuda, aunque en rubros como honestidad y efectividad, le den una calificación menor.
Mérida Análisis
Razones de los altos niveles de seguridad en Mérida abordadas en reciente evento.
Experta
En el VI Foro Económico Empresarial del IMEF, celebrado el martes, la experta en asuntos de seguridad, Ana María Salazar, expuso cinco razones que podrían explicar esta situación, en un contexto nacional donde prevalece la inseguridad.
Desinterés del crimen
Según la especialista, estas razones son: razones geográficas, la alta capacitación de la policía, adiestrada para enfrentar bandas altamente potentes, y el desinterés de los criminales por Mérida.
Protección
También puede haber razones económicas, como, por ejemplo, que el gobierno federal haya decidido proteger a Mérida, como lo hace con Cancún, y como no lo ha hecho con Acapulco.
Control
Otra razón sería que Mérida es segura porque está bajo control de una sola organización criminal, lo que evita el conflicto. Megamedia.
Mérida es una de las ciudades más seguras del país, pero hay indicios de que las cosas podrían empezar a cambiar, advierten expertos en seguridad nacional.
De 2011 a 2013, por ejemplo, creció 42 por ciento la incidencia delictiva en el Estado, principalmente por el aumento en el robo y la extorsión, dice Roberto Gregorio Banuet Marín, investigador de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), que realiza un estudio sobre seguridad y violencia en el Sureste.
—Este dato muestra que algo está cambiando, pero otro dato que lo confirma y que al menos a mí me alarma —dice— es la reciente aparición en Yucatán de grandes bandas de golpeadores a sueldo, auspiciadas, supongo por el mismo gobierno y su aparato policiaco.
—Una primera actuación de esas bandas la vimos el día de las elecciones en Temax, donde dos pandilleros murieron al tratar de reventar los comicios a favor del PRI, con un zafarrancho.
—Estos vándalos volvieron a aparecer, ahora encapuchados y armados con palos, en una gasolinera de Progreso, para atemorizar a los vecinos inconformes con su apertura y más recientemente, otra vez encapuchados, agredieron a una mujer en Conkal, inmiscuida en un lío ejidal.
Futuros Zetas
—Ojo —dice Banuet Marín, entrevistado en esta ciudad—, este es el caldo de cultivo de lo que serán los futuros Zetas de Yucatán.
El investigador advierte también que la percepción ciudadana sobre la alta seguridad en Mérida ha empezado a erosionarse. Según la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (Envipe), del Inegi, en 2011, ocho de cada 10 yucatecos mayores de 18 años se sentía seguro en el Estado. En 2013, esta percepción bajó al 70%
En este mismo sentido se expresa la experta en temas de seguridad nacional Ana María Salazar Slack, subsecretaria Adjunta de Defensa para Política y Apoyo Antidrogas del Departamento de Defensa de los Estados Unidos en 1998, quien participó como ponente en el VI Foro Económico Empresarial del IMEF, celebrado el martes en esta ciudad.
En su intervención en ese evento, la especialista recomendó no confiarse de que Mérida es una ciudad segura, “porque puede volverse insegura en cualquier momento como ocurrió en Guadalajara”.
Salazar Slack expuso cinco razones para explicar el actual nivel de seguridad de Mérida, en un contexto nacional donde ocurre todo lo contrario. Estas son: razones geográficas, la alta capacitación de la policía, adiestrada para enfrentar bandas altamente potentes, y el desinterés de los criminales por Mérida. También puede haber razones económicas, dice. Por ejemplo, que el gobierno federal haya decidido proteger a Mérida, como lo hace con Cancún, y como no lo ha hecho con Acapulco.
Otra razón sería que Mérida es segura porque está bajo control de una sola organización criminal, lo que evita el conflicto.
—Como sea —añade la especialista— el tema es que no hay que confiarse. Mérida es una ciudad segura y ojalá siga así, pero este es un momento privilegiado para crear instituciones sólidas y fuertes contra el robo y la extorsión y contra lo que vendrá después.
Crimen multinacional
—Y esto es así por una sencilla razón: Mérida no puede quedar exenta de la ola criminal que pasa por todo el país. El crimen funciona como una empresa multinacional, lo que sucede en alguna ciudad de Tabasco, de Guerrero o de Colombia, por ejemplo, afecta a otras, aparentemente desconectadas, porque la delincuencia es multinacional.
Para Banuet Marín, un dato duro que muestra este cambio en la condiciones de seguridad, es que en 2011, el último dato disponible, 20,026 empresas yucatecas, el 27.5% del total, declaró haber sufrido por lo menos un delito en sus instalaciones, principalmente actos de corrupción, robo y extorsión, según la Envipe de ese año.
—Esto ocasionó pérdidas por $389 millones en ese año y un gasto en sistemas de seguridad empresarial de $654 millones, además de crear una percepción de inseguridad en el 37 por ciento de los encuestados.
—A este dato se le añade, como ya dijimos —explica Banuet Marín— que el índice de incidencia delictiva en Yucatán aumentó 42 por ciento entre 2011 y 2013 debido, sobre todo, al incremento del robo (este delito está presente en todos los municipios), y la extorsión.
—Esto ha disparado el miedo, lo que explica la colocación de medidas de protección en el 39% de los hogares yucatecos que, a su vez, significaron un costo de $1,768 millones, en 2013.
Sin embargo, a juicio del investigador de la Flacso, un dato positivo que asoma en la Envipe es que pese a ese panorama, más del 60% de los yucatecos confía en la policía local y el 88% percibe a la corporación como dispuesta siempre a prestar ayuda, aunque en rubros como honestidad y efectividad, le den una calificación menor.
Mérida Análisis
Razones de los altos niveles de seguridad en Mérida abordadas en reciente evento.
Experta
En el VI Foro Económico Empresarial del IMEF, celebrado el martes, la experta en asuntos de seguridad, Ana María Salazar, expuso cinco razones que podrían explicar esta situación, en un contexto nacional donde prevalece la inseguridad.
Desinterés del crimen
Según la especialista, estas razones son: razones geográficas, la alta capacitación de la policía, adiestrada para enfrentar bandas altamente potentes, y el desinterés de los criminales por Mérida.
Protección
También puede haber razones económicas, como, por ejemplo, que el gobierno federal haya decidido proteger a Mérida, como lo hace con Cancún, y como no lo ha hecho con Acapulco.
Control
Otra razón sería que Mérida es segura porque está bajo control de una sola organización criminal, lo que evita el conflicto. Megamedia.