La señora María del Rocío Castro Rejón fue detenida y enviada al penal en cumplimiento de una orden de aprehensión acusada del delito de despojo de cosa inmueble, por haberse apoderado a la fuerza de la casa de su padre y, por si fuera poco, enviarlo a la cárcel en una afán de apoderarse de la propiedad.
Esta historia se ventiló ayer en el Juzgado Sexto Penal, donde la mujer fue presentada tras las rejillas de prácticas por la denuncia que interpuso su papá Guillermo de Jesús Castro y García.
La hechos ocurrieron en el puerto de Progreso, donde se ubica el predio.
En marzo del 2013, la mujer llegó acompañada de otras personas e incluso de elementos de la Policía Municipal de Progreso y mientras el señor estaba descansando, entraron y con un martillo rompieron las puertas y candados.
A petición de la mujer y otras personas, el señor fue detenido por los policías y retenido de manera poco ortodoxa por 48 horas, en los separos municipales.
Sin embargo, el hombre se enfermó y se le tuvo que enviar a un hospital. Al querer regresar a su casa, ya no pudo entrar y tampoco le dejaron sacar sus cosas,motivo por el cual interpuso la denuncia que generó la orden de aprehensión que hoy se dio por cumplida.
Tras declarar y negar los hechos, la acusada depositó, a través de sus familiares, 10 mil pesos de fianza más mil 800 de multa.
Esta historia se ventiló ayer en el Juzgado Sexto Penal, donde la mujer fue presentada tras las rejillas de prácticas por la denuncia que interpuso su papá Guillermo de Jesús Castro y García.
La hechos ocurrieron en el puerto de Progreso, donde se ubica el predio.
En marzo del 2013, la mujer llegó acompañada de otras personas e incluso de elementos de la Policía Municipal de Progreso y mientras el señor estaba descansando, entraron y con un martillo rompieron las puertas y candados.
A petición de la mujer y otras personas, el señor fue detenido por los policías y retenido de manera poco ortodoxa por 48 horas, en los separos municipales.
Sin embargo, el hombre se enfermó y se le tuvo que enviar a un hospital. Al querer regresar a su casa, ya no pudo entrar y tampoco le dejaron sacar sus cosas,motivo por el cual interpuso la denuncia que generó la orden de aprehensión que hoy se dio por cumplida.
Tras declarar y negar los hechos, la acusada depositó, a través de sus familiares, 10 mil pesos de fianza más mil 800 de multa.