Hace 15 años nacía el bar “Starkenberg Brewery”, ubicado en Tarrenz, en el seño de una familia austriaca, la cual disfrutó de los beneficiones de la cerveza, al bañarse en ella, y ahora comparte sus vivencias con quienes deseen visitarlos y sumergirse en esta experiencia.
Los dueños y anfitriones del estableciemiento, aseguran que el olor de esta bebida es reconfortante, pues es fuerte y está en todos lados. Además, recomiendan a sus clientes no ducharse luego estar un tiempo en la piscina y dejar que los nutrientes sigan en el cuerpo, hasta su eliminación natural.