Ejemplo de cómo se pierden oportunidades: Se niega a vender todas sus empanadas en un “jalón”

25 mayo 2016
Noticias de Yucatán Compartir



En un vídeo de 51 segundos, que circula por las redes sociales, desde un automóvil alguien pide a una señora que vendía empanadas, que se las venda todas. La mujer, bajo diversos argumentos “porqué estoy empezando”, “porque luego que vendo” y “no mas no puedo”, entre otros, decide no venderlas todas en una sola operación y trabajar su jornada completa.  


Es así como se desarrolló la escena:
Comprador: ¿Oiga a cómo vende las empanadas?
Vendedora: A $10
C: ¿Las vende todas?
V: Es que no puede… Apenas estoy saliendo
C: Pues de una vez para que termine temprano, véndame todas las empanadas.
V: Es que no se puede entiéndelo porque tengo ir allá para arriba
C: Se las pago a $12 véndame todas
V: Las vendo a $10
C: MMmm yo se las pago a $12
V: Vas a desperdiciar tu dinero porque traigo muchas, como 40 ó 35.
C: Entonces ¿no me las vende todas?
V: No, no puedo, si quieres unas, las que quieras, menos todas, te puedo dejar unas 10, o más, 15
C: Tooodas… yo quería todas
V: No puedo. Se dio la media vuela y se retiró
C: Ok gracias.

El 22 de abril pasado publicamos un caso similar:

En un portal de Tabasco se publica un vídeo, de apenas un minuto, que se ha hecho viral, en donde una persona llama a un vendedor de cacahuates, a quien le pregunta en cómo los das. La respuesta fue: "a $10 la bolsita".
Entonces, el comprador le dice "déjamelos a $15 y el vendedor replica que no, porque "no me sale".
¡Pero si tu los das a $10 y yo te voy a dar $15!
Y el vendedor insistió en que "no me sale"
Bueno por $30... dijo el sujeto de automóvil.
En varias ocasiones repite la oferta "déjamelos en $15" y la respuesta fue siempre "no me sale"
Bueno te voy a dar $15... -el comprador
No, quiere que me regañen a mi -el vendedor
Incluso después que le da los $10, le insiste en darle $15, pero no acepta.
Esto demuestra la triste realidad que vivimos en México.
Afortunadamente los sujetos que grabaron el vídeo no se aprovecharon del humilde vendedor, pero tampoco nunca lo sacaron de su error.
Y en momento dado en tono sarcástico el comprador le pregunta a su acompañante del auto ¿es tu papá?
Liga a la nota anterior:

No vende sus cacahuates más caros porque "no me sale"
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