La tragedia en la carretera en la autopista Mérida-Cancún, donde un autobús del ADO impactó por alcance a otro bus particular que se había averiado minutos antes, enlutó a vecinos de Celestún que habían organizado una excursión a las playas de Quintana Roo.
Datos indican que esta última unidad fue rentada por familias de Celestún para acudir a visitar un parque recreativo en Cancún.
Como informamos, el mortal accidente ocurrió durante los primeros minutos de este lunes, cerca del municipio de Kantunil, en el carril que va de oriente a poniente.
De acuerdo con reportes policiacos, un autobús ADO, placas 529-HY-6 y número económico 8059, procedente de Valladolid, se estrelló contra un camión de pasajeros particular, matrícula 4-ZCA-63, que estaba estacionado debido a un desperfecto con un neumático, y que no tenía el abanderamiento correspondiente para ser visto durante la noche.
Hasta el informe de esta tarde ya ascienden a seis los muertos, entre los que se encuentran Andres Pardenilla Canché, chófer del camión rentado y dos pasajeros más del ADO, quienes hasta el momento permanecen en calidad de desconocidos.
De las seis personas que perdieron la vida, tres son natos de Celestún, siendo integrantes de la familia Mena Narváez; la ahora occisa Asunción Ávila Mex de 47 años y su esposo Mauricio Ernesto Mena Narváez, de casi 50 años, así como su nuera Jocelyn Chay Caamal, de 26 años, quien murió mientras era trasladada a la clínica T1 del IMSS, luego de sufrir un traumatismo craneoencefálico y edema subdural.
La ahora extinta “Yoce” tenía como pareja a Raymundo Mena Ávila, quien igual viajaba en el autobús, junto con el bebé Elías de apenas dos años y medio, cuyo estado es crítico. También se supo que el joven Oliver Alain Mena Ávila, hermanito de Raymundo (a) “Toto” resultó herido y ha sido intervenido quirúrgicamente.
Tres fallecidos
La conmoción del “lunes negro” en el municipio costero se ha resentido principalmente en las redes sociales, donde varias personas han expresado su asombro y tristeza por el trágico accidente.
Cabe señalar que algunos excursionistas celestunenses no se encontraban en el camión al momento del choque, pues al ver que la unidad tardaría en ser reparada, decidieron pedir “aventón” en algunas vagonetas, ya que estaban situados cerca de un cruce peligroso y transitado.
Trascendió que Jocelyn, era la encargada del paseo y se disponía a terminar de señalizar con maleza el averiado camión, pero lamentablemente sobrevino el funesto choque con la unidad ADO procedente de Tulum.