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Los pasajeros de un vagón del metro de Nueva York fueron testigos el jueves pasado de un acto de agresión a una mujer por parte de un violento pasajero, pero el incidente no se quedó sin respuesta.
"¡Perra, no eres nada! Ya he violado a perras blancas como tú", le dijo el hombre a la víctima, de 37 años de edad, cuando esta le pidió que cerrara las piernas en un caso del conocido como 'manspreading'. El hombre siguió insultándola y empezó a molestarle con codazos, hasta que finalmente le propinó un puñetazo con tanta fuerza que le rompió un labio e hizo que su cabeza se golpeara contra la pared del vagón.
"Después de eso, solo sentí la sangre", recogió el testimonio de la mujer el canal CBS News.
En ese momento, uno de los pasajeros entró en escena reduciendo al agresor y obligándolo a bajar en la siguiente parada. Otro testigo presencial filmó la parte final del incidente con su teléfono y calificó de "buen samaritano" al que intercedió por la víctima.
La mujer fue a denunciar lo sucedido ante la Policía inmediatamente, pero aunque inicialmente le dieron evasivas, según informa NY Daily News, los agentes acabaron deteniendo al sospechoso, identificado como Derek Smith, de 56 años.
Ahora, con este bajo custodia, su víctima dice sentir un "gran alivio". Se ha descubierto que el hombre tenía antecedentes penales, incluido uno relacionado con abusos sexuales.
El 'manspreading' es un concepto que se refiere a la manera de sentarse en lugares públicos que tienen algunos hombres con las piernas exageradamente abiertas, invadiendo así el espacio de los asientos vecinos.
Actualidad RT
