Una vez que se hizo oficial la llegada de Pedro Caixhina como director técnico al Cruz Azul, no tardarán en acelerar las negociaciones con el Guadalajara para que Carlos Fierro sea uno de los primeros refuerzos de La Máquina.
El anuncio oficial no tardará en llegar, toda vez que el jugador ya está arreglado al ciento por ciento, algo que negoció el propio delantero junto con su representante, y Eduardo de la Torre, la semana pasada, en Guadalajara.
Lo único en lo que todavía tratan de llegar a un acuerdo ambas directivas es en el precio por el traspaso del atacante, lo que no podría pausar la operación.
Fierro debutó con las Chivas en 2011 y para el Clausura 2016 fue enviado al Querétaro, club en el que recuperó su nivel futbolístico, por lo que Matías Almeyda lo contempló para que regresara al Rebaño. En el último torneo, marcó tres goles en 930 minutos de juego.
La directiva del Guadalajara no acostumbra a dar lista de elementos transferibles, porque aseguran a la interna, que no es una buena imagen para el jugador. Nombres van y vienen de posibles refuerzos, la realidad es que para contratar, tienen que deshacerse de alguien, porque no hay dinero para invertir.
Las Chivas han recibido ofertas por jugadores, no tienen pensando dejar ir a ningún pez gordo, aunque hay otros casos que no podrían descartarse como Hedgardo Marín, quien entra en los planes de Almeyda para el torneo entrante, pero hay equipos interesados en sus servicios.
El mercado que tiene Marín es bueno, ya que centrales jóvenes de perfil zurdo no hay muchos, además que trae un proceso en selecciones menores, motivo por el cual hay un equipo interesado en sus servicios, pero no se ha dado nada oficial de su posible salida del Rebaño Sagrado.
En el tema de refuerzos, Chivas sigue insistiendo en el tema de adquirir a Rodolfo Cota, arquero que le dio seguridad al arco y que personalmente habló con la directiva de Pachuca, dueña de sus derechos federativos para que hicieran rebaja al precio que había en la opción de compra, a lo cual accedió la gente de Tuzos y ahora los rojiblancos tienen la última palabra.