Comer comida chatarra de vez en cuando no está mal, sin embargo,
convertirlo en un estilo de vida es caminar hacia una muerte
lenta y dolorosa.
Recientemente científicos de la Universidad Estatal de
Portland, Estados Unidos, descubrieron en un nuevo estudio publicado en la
revista Proceedings of the National Academy of Sciences que los
alimentos ricos en grasas y azúcares aumentan el riesgo de sufrir sepsis
grave, una enfermedad que puede provocar la muerte repentina.
Aunque quisiéramos que no
fuera cierto, es verdad. La
sepsis -que es la reacción del cuerpo para combatir infecciones- puede
provocar shock e insuficiencia orgánica.
En el estudio, los ratones que
fueron alimentados con la dieta occidental —caracterizada por ser
baja en fibra y alta en grasa y azúcares— mostraron un aumento en la inflamación
crónica, niveles de sepsis más graves y tasas más altas de
mortalidad en comparación con los ratones que recibieron una alimentación
equilibrada.
Brooke Napier, profesora
asistente de biología en la Facultad de Ciencias y Artes Liberales de la
Universidad Estatal de Portland, afirmó que esos hallazgos sugieren que
los ratones alimentados con la dieta occidental sufrían niveles más graves
de sepsis y morían más rápido debido a alguna característica de su dieta,
y no por el aumento de peso o por el microbioma (el conjunto de bacterias del
cuerpo).
El sistema inmunológico de los
ratones con una dieta occidental tenía un aspecto y un funcionamiento
diferentes", asegura Napier.
Parece que la dieta
manipule la función de las células inmunitarias para que seas más susceptible
a la sepsis, y luego, cuando desarrolles la sepsis, mueras más
rápido" .
Napier también indicó que el
equipo científico identificó en ratones alimentados con dieta occidental marcadores
moleculares que podrían usarse comopredictores o biomarcadores para
pacientes con alto riesgo de sepsis grave o pacientes que pueden necesitar un
tratamiento más agresivo.
El laboratorio de Napier está
estudiando si lo que influye en la función de las células inmunitarias son las
grasas específicas en la dieta alta en grasas.
Los hallazgos pueden ayudar a
los hospitales a controlar mejor las dietas de los pacientes en la
unidad de cuidados intensivos, ya que los enfermos ingresados en esas unidades
son las personas que tienen más probabilidades de desarrollar sepsis.