Después de atrapar criminales, los policías de Ciudad de México tienen que enfrentarse a una dificultad burocrática: “el Informe Policial Homologado”, en el que si cometen el más mínimo error los delincuentes quedan en libertad.
El 24 de octubre pasado, el juez de control, Felipe de Jesús Delgadillo Padierna, liberó a 27 de 32 detenidos tras un operativo en la calle de Peralvillo, colonia Morelos, porque, entre otras cosas, calificó como “inverosímil” lo escrito en el Informe Policial Homologado, donde se describió que un solo policía revisó a todos los aprehendidos, embaló la droga decomisada y los trasladó ante el Ministerio Público.
Este documento que se ha convertido en el punto débil de la labor policial, debe llenarlo el primer elemento que llegue a una escena del crimen. Sin embargo, algo que debería ser un mero trámite se convierte en un dolor de cabeza para los uniformados ante una falta de capacitación, el bajo nivel educativo que tienen y hasta las horas de trabajo acumuladas o el estrés posterior a una detención, afirmó Salvador Guerrero, presidente del Consejo Ciudadano.
La muestra es que en Ciudad de México, 70 por ciento de los elementos de la Secretaría de Seguridad tarda más de una hora en terminar el informe, cuando las propias autoridades estipulan que deberían llenarlo en 45 minutos, indicó.
Y es que además de solicitar la narrativa de los hechos, datos del policía y de los presuntos criminales, el informe pide dibujar un croquis del lugar del delito y hasta coordenadas geográficas.
“Todo aquello de lo que habla este informe es de un policía capacitado, educado, empoderado, respetado, sujeto de dignidad, de respaldo y capacidad institucional y salarial, y de una formación jurídica básica. Hay un rezago de años y un intento importante de esta administración de reponerlo”, explicó Guerrero.
El Informe Policial Homologado que se utiliza en CdMx cuenta con 15 páginas, tiene siete secciones y ocho anexos que el policía debe llenar tras realizar un operativo, una detención o el descubrimiento de un crimen.
Los elementos de seguridad deben responder incluso si se utilizó la fuerza y en qué nivel. También detallar si se decomisó algún objeto a un detenido y ubicar en una silueta dibujada en qué parte del cuerpo lo llevaba.
En ocasiones los policías son auxiliados por el agente del Ministerio Público para terminar de llenar el informe ante el desconocimiento del proceso.
Según el titular del Consejo, sí existe una correlación entre el bajo nivel educativo de los policías y la falta de capacidad para llenar el informe.
De acuerdo con las autoridades capitalinas, alrededor de 33 mil policías en activo tienen únicamente la secundaria y el resto la preparatoria. Los que tienen estudios universitarios son una minoría en la corporación.
Para apoyar la formación policiaca, el Consejo Ciudadano está brindando un curso a los elementos de seguridad para que sepan trabajar con el informe policial y lo completen correctamente.
Actualmente se han realizado 26 pláticas en las que participaron 420 agentes de la policía auxiliar y la preventiva. Se atendieron ocho sectores de la alcaldía Cuauhtémoc, como Ángel Asturias, Buenavista, Centro, Cuauhtémoc, Morelos, Revolución, Roma y Tlatelolco.
El objetivo es que para abril del próximo año se esté trabajando en todas las alcaldías, dando mayor énfasis a Iztapalapa.
De los 11 aspirantes a ocupar el cargo de titular de la Fiscalía General de Justicia de Ciudad de México, únicamente nueve cumplieron con los requisitos solicitados, informó el Consejo Judicial Ciudadano.
Los candidatos son Juan Manuel Carlos Daza Gómez, Ernestina Godoy Ramos, Diana Cristal González Obregón, Alfonso Antonio Guerrero Martínez, Alejandro Hernández Morales, Jorge Antonio Mirón Reyes, Victoria Pacheco Jiménez, Verónica Román Quiroz y Fernando Herrera Vázquez.
Con información de: Cinthya Stettin.
