El ministro de Agricultura francés, Didier Guillaume,
anunció que a partir del próximo año se prohibirá triturar crías de gallinas
vivas, una práctica cuestionada pero extendida en la industria avícola.
"El objetivo es obligar a las empresas" a dejar de
utilizar esta práctica, declaró Guillame a la cadena de televisión BFM.
Al año, cerca de 50 millones de crías son sacrificadas a las
pocas horas de nacer ya que la industria avícola no considera rentable
alimentarlos, informó el sitio informativo 24 matins.
Del mismo modo, "a fines de 2021, no habrá más
castración de lechones vivos" , aseguró, pues el ministerio
"publicará textos reglamentarios en las próximas semanas para avanzar
hacia "Prohibición de prácticas agrícolas dolorosas", reportó el
diario Le Monde.
En contraste, las asociaciones para la protección de los
animales se han mostrado reservadas con este anuncio.
"El verdadero anuncio sería establecer una fecha límite
para detener la castración y permitir solo alternativas con excepciones para
ciertas producciones", reaccionó en un comunicado la asociación Compassion
in World Farming (CIWF).
El gobierno francés busca que los fondos estatales se
destinen inmediatamente a edificios que favorezcan la vida natural de los
animales de granja.
Por ello, ha adelantado sobre la futura política agrícola, la financiación de los criadores que invierten en edificios ganaderos para cumplir los estándares de bienestar animal.