Más de 100 huevos de tortuga de carey quedaron
destruidos por personas que, ignorando además las medidas de prevención contra
el coronavirus, acamparon en el playón de Chuburná Puerto y
dañaron los nidos colocando bloques para hacer fogatas.
La acción podría haber sido incluso intencional, pues dichas
fogatas se hicieron exactamente en las zonas de anidación marcadas y
delimitadas por los voluntarios cuidadores de los huevos, que no descubrieron
los daños sino hasta ayer por la tarde.
De acuerdo con el dato obtenido de este caso, ayer se
observó que los nidos del playón de Chuburná Puerto habían quedado
destruidos y quemados, pues personas desconocidas llegaron a acampar justamente
en los nidos marcados de tortuga de carey.
Este lugar ha tenido que ser delimitado pues vacacionistas pasan
por ese lugar con cuatrimotos, y como los huevos de esta especie en peligro de
extinción no son depositados a mucha profundidad en la arena, resultan
destruidos.
Sin embargo, ahora también hay que luchar contra la gente
que acampa en plena pandemia, con lo que además ignoran las medidas para evitar
la propagación del coronavirus.
Los nidos fueron pisados, aplastados con bloques, y quemados con fogatas, estimándose una pérdida de más de 100 embriones de tortuga, daño irreparable en el cual se pide la intervención de las autoridades ambientales.