En Yucatán hay alrededor de 50,000 niños, niñas y adolescentes que realizan alguna actividad laboral, manifestó la diputada Cinthya Valladares Couoh, secretaria de la Comisión de Derechos de la Niñez de la Cámara de Diputados.
De ese total, unos 35,900 son varones (72%) y 14,000 son mujeres (28%).
Si se toma como base que en Yucatán hay, en números cerrados, 478,500 niñas, niños y adolescentes con edades que van de cinco a 17 años, entonces se tiene que el 14 % de los varones de ese universo realiza algún trabajo, y lo mismo hace el 6 % de las mujeres de ese sector de la población.
Advirtió que las cifras de ese problema social en Yucatán se acercan al promedio nacional en esa materia.
La funcionaria expuso lo anterior en la inauguración del Foro Internacional “México ante el reto de erradicar el trabajo infantil en la protección de los derechos humanos de las niñas, niños y adolescentes”, realizado en el Centro Cultural Olimpo.
La reunión fue organizada por la Cámara de Diputados y las comisiones nacional y estatal de los derecho humanos, con motivo de la próxima conmemoración, mañana jueves, del Día Internacional contra el Trabajo infantil.
En la apertura de esa junta el secretario ejecutivo de la Codhey, José Enrique Goff Aillloud, dio cifras nacionales sobre esa situación: 47 % de las niñas y niños ocupados no recibe ninguna remuneración, 25 % gana hasta un salario mínimo, 24 % alcanza de uno a tres salarios y sólo el 2 % logra más de tres.
-Este foro es para crear conciencia sobre este fenómeno social -señaló-. También es para atender con urgencia sus causas, que son la falta de oportunidades educativas, pobreza extrema, marginación, abandono social, violencia y discriminación.-Hansel Vargas A.
Ley | Que se aplique
El Artículo 4o. constitucional ofrece elementos para proteger a los infantes.
Si se cumpliera…
María Teresa Vázquez Baqueiro, directora del Centro de Investigaciones de la Codhey, dijo que el problema disminuiría si tan sólo se aplicara una parte de ese artículo, que ordena que hayan políticas públicas para combatirlo y éstas se ejecuten, vigilen y evalúen, y que los tutores o custodios de los niños exijan que se cumpla lo anterior.
Un reto para la sociedad
Urgen a erradicar el trabajo que realizan niños
política y gobierno
Uno de los grandes retos a los que se deben enfrentar todos -el gobierno, la sociedad y la familia- es el de erradicar el trabajo infantil, un mal que está extendido y es mayor que lo que se reconocen, dijo ayer la diputada federal panista Cinthya Valladares Couoh.
En la inauguración del foro internacional “México ante el reto de erradicar el trabajo infantil en la protección de los derechos humanos de las niñas, niños y adolescentes”, en el Centro Cultural Olimpo, la legisladora enfatizó que en Yucatán hay 50,000 niños, niñas y adolescentes que realizan alguna actividad laboral. De ese total, 35,900 son varones (el 72%) y 14,000 son mujeres (el 28%).
De acuerdo con los datos que proporcionó la funcionaria, si se toma como base que en Yucatán hay 478,500 niñas, niños y adolescentes con edades que van de cinco a 17 años, entonces el 14 % de los varones realiza algún trabajo, y lo mismo hace el 6 % de las mujeres de ese sector de la población.
-Este foro -indicó- busca ser un espacio de reflexión y análisis sobre la situación de las niñas, niños y adolescentes que trabajan y sobre las condiciones a las que se enfrentan en su vida diaria, a fin de visualizar y encontrar las mejores políticas y acciones para abatir el problema, en particular en el marco de la ausencia de la protección social que padecen los niños.
-El llamado es a reflexionar en torno de la protección social que es necesaria para mantener a las niñas, niños y adolescentes alejados del trabajo infantil e inclusive retirarlos del mismo -dijo.
Preferirían ir al colegio
Estudio de la Uady derriba mitos sobre el niño que trabaja
Contra la creencia popular los niños, niñas y adolescentes que trabajan son obligados a ello, con frecuencia en jornadas mayores a las ocho horas diarias, con poca paga y con su integridad física y psicológica expuestas.
Ellos preferirían ir al colegio o estar en sus casas con la familia. Sueñan con tener alguna profesión. Y es falso que todos ellos provengan de familias pobres, los hay que son de la clase media. Tampoco es verdad que son chiapanecos, son de Mérida y el interior del estado.
Lo anterior es parte de las conclusiones que arrojó una encuesta realizada entre 195 niños, niñas y adolescentes de siete a 17 años de edad que trabajaban. Del total, 115 de los entrevistados son mujeres y los 80 restantes son varones.
Esa investigación la realizó Damaris Estrella Castillo, antropóloga, psicóloga y profesora de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Yucatán. Ella fue una de las participantes en el Foro Internacional “México ante el reto de erradicar el trabajo infantil en la protección de los derechos humanos de las niñas, niños y adolescentes”, realizado ayer.
En su exposición se refirió a 10 mitos que hay sobre ese problema social:
-Es falso que disfruten el trabajo y que lo prefieren al colegio. Cuando les dan a elegir optan por quedarse en el hogar, convivir con sus abuelos y otros adultos. Quieren estudiar, los hay que sueñan con tener una profesión.
Lugares inseguros
-No es cierto que trabajan en sitios seguros. Se queman con líquidos calientes, se quejan de dolores de espalda y rodilla por llevar cargas, y son vulnerables a sufrir abuso sexual y ser contagiados de enfermedades.
-Tampoco es verdad que todos tienen seguridad social. La encuesta mostró que el 24% carecían de ello, hubo quienes acudieron a consulta médica privada para tratarse males derivados del trabajo.
-No se les hace un favor al crearles un espacio para trabajar. Laboran demasiadas horas porque los patrones acomodan los horarios a su conveniencia, y en muchos casos la remuneración es inferior al salario mínimo.
-Es falso que sólo las niñas están expuestas a la trata de personas y el abuso sexual. Todos los varones encuestados revelaron que al menos una vez recibieron alguna insinuación sexual.
-Es mentira que no quieren estudiar y por ello optan por trabajar. El dinero que ganan es para ayudar a sus padres o hermanos pero también les da privilegios. La influencia social los hace desear, por ejemplo, tener teléfonos celulares modernos, de modo que trabajan para comprarlos.
-Tampoco es cierto que el trabajo los hace responsables y los alejan del ocio y los vicios. Esos menores de edad afirman que el trabajo es mucha responsabilidad para ellos, terminan sus jornadas malhumorados, generan problemas de conducta, sufren “bullying”, tienen mala alimentación y pierden su infancia.
-Es ficticio que sólo trabajan aquellos que son pobres. Aquí hay un foco rojo pues se halló que también los hay que son de clase media.
-No es verdad que todos son chiapanecos. El 80 % de los entrevistados nació en Mérida, el resto son del interior del estado.- Hansel Vargas Aguilar
Una encuesta derriba mitos sobre el trabajo infantil en Yucatán
No son huérfanos
Uno de los mitos es que esos menores de edad son huérfanos o sólo tienen a uno de sus padres. De los 195 encuestados 192 tenían familias nucleares o extensas, es decir, también padrinos, tíos, etcétera.
Son sanos, pueden trabajar
Se les explota creyendo que por ser jóvenes tiene fortaleza y salud, pero no es así.
Otras creencias falsas
Es un error pensar que el trabajo los hace responsables, que tienen buen salario, que son pobres o procedentes de Chiapas. Tampoco es cierto que rechacen la escuela y prefieran el trabajo, y que laboren en condiciones seguras.
Otros problemas
Uno de los adolescentes fue obligado a casarse por embarazar a su novia y ahora debe sostener a toda la familia. Una muchacha que quedó preñada fue expulsada de su hogar y ahora debe buscar ingresos suficientes para ella y el bebé que viene en camino.
Va en aumento
La doctora Damaris Estrella Castillo advirtió que crece el número de niñas, niños y adolescentes que trabaja. Durante la encuesta se preguntó a los entrevistados si conocían a otros menores de edad en esa situación, y todos respondieron citando otros casos de infantes en esa situación.
