- Resurgen dos dolores de cabeza a causa de las lluvias intensas
- La amenaza de los moscos se extiende a todo el Estado
- 09/07/2010
Con la intensificación de las lluvias aparecieron de nuevo dos amenazas: los baches, que se han multiplicado en las calles de Mérida, y el dengue, que ya ocasionó la movilización del sector salud por la rápida reproducción del mosquito transmisor en estas fechas.
Las consecuencias del mal tiempo son evidentes en calles y avenidas de esta capital: ante los continuos encharcamientos el pavimento se deteriora y esto da pie a un cíclico dolor de cabeza de autoridades y ciudadanos.
En el aspecto de salud, la Secretaría estatal del ramo anunció que ya tiene brigadas listas para nebulizar de inmediato al Estado, con el propósito de evitar más casos de dengue.
Las autoridades pidieron la colaboración de la ciudadanía para cuidar acumulaciones de agua en los patios, porque bastan 72 horas para que se conviertan en criaderos de moscos.
Una de las recomendaciones es deshacerse de cacharros lo más pronto posible.
A la fecha se han presentado 580 casos de dengue en todo Yucatán, algunos de ellos de la variedad hemorrágica. Representan un 40 por ciento más de los casos atendidos en 2009.
Los perjuicios de las fuertes lluvias no sólo se reflejan en las calles y en el aspecto sanitario. El mercado de San Benito es una de sus víctimas más recientes, pues su estacionamiento se inundó y fue cerrado ayer prácticamente todo el día. Por la noche, el Ayuntamiento informó que después de varias horas de trabajo logró desalojar el agua.
Y a escasa distancia de Mérida, Kanasín se ha convertido en una zona de lagunas y también de cráteres.
La situación en ese municipio es tal que ayer varias escuelas tuvieron que suspender clases. Una pista de patinaje, en el fraccionamiento Residencial, se transformó en una piscina en la que se bañaron numerosos niños, sin tomar conciencia del peligro de su acción.
Otras comunidades también viven una invasión de moscos. Tal es el caso en Celestún, Hunucmá, Dzilam de Bravo, Dzilam González, Dzidzantún, Yobaín, Cansahcab y Temax, por citar algunos que se enfrentan a la situación más crítica.
En algunas escuelas de Dzilam de Bravo, grupos de alumnos organizaron concursos para ver “quién mata más mosquitos”.
