Ex alcaldes, hacían "súper mal" su trabajo y cobraban "súper bien"

08 septiembre 2015
Noticias de Yucatán
Gilberto Uitz Pech, ex alcalde de Umán, se puso un sueldo de $117,000 al mes, para destruir a su municipio


La nota principal del Milenio, destaca que al iniciar su período los nuevos alcaldes se encontraron con que sus antecesores devengaban sueldos de diputados y hasta de secretarios de gobierno. Por ejemplo:

En Acanceh, el alcalde saliente del Partido Acción Nacional (PAN), Jorge Faustino Tolosa Pool, ganaba 86 mil pesos al mes. La nueva alcaldesa emanada del partido Nueva Alianza, Guadalupe Zapata González, dijo que se reducirá en 50 por ciento su sueldo; el ajuste será extensivo para los regidores, que en la administración pasada percibían 13,500 pesos a la quincena y ahora ganarán siete mil pesos en el mismo periodo. 

En Umán, Jesús Quintal Ic ganaba 117 mil pesos mensuales. El actual alcalde Freddy Ruz Guzmán, emanado del PAN, dijo ayer que se redujo el sueldo en 50 por ciento. Además, los demás regidores y directores del Ayuntamiento tendrán una reducción del 30 por ciento de salario. 

Otros que también harán ajustes a su salario son: el alcalde panista de Hunucmá, José Alberto Padrón Romero, quien dijo que su salario será de 36 mil pesos al mes. El ex alcalde priista Delio Jaime Pérez Tzab ganaba 40 mil pesos mensuales. Los regidores ganaban 30 mil pesos mensuales y ahora ganarán 26 mil pesos al mes. El alcalde panista de Cantamayec, Orlando Ek Sansores, dijo que habló con los regidores del Cabildo la reducción del sueldo en 30 por ciento. Agregó que el exalcalde priista José Melchor Dzib Dzib ganaba 26 mil pesos al mes, en tanto los regidores ganaban 16 mil pesos mensuales.

El alcalde panista de Dzemul, Daniel Gregorio Campos Ortega, dijo que se reducirá el salario de 15 mil a 12 mil pesos mensuales. El ex alcalde priista Domingo Argimiro Ortega Graniel ganaba 15 mil pesos mensuales.

Como un común denominador,  los nuevos alcaldes señalan que encontraron las alcaldías con las arcas vacías, en algunos casos los funcionarios salientes se llevaron hasta las mesas y sillas y no tenían ni papel de baño.

En otra nota se informa que los regidores del PRI y del PAN que exigían un incremento salarial de 240%, a cambio de autorizar el nombramiento del tesorero en Dzidzantún, se retractaron ante la presión social.
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