Noticias de Yucatán
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Parece que el mal ejemplo comienza a cundir en Yucatán, pues igual que ocurrió hace dos semanas en una casona de la avenida Colón, de nuevo ladrones asaltaron a una pareja de la tercera edad, ahora en el centro de Ucú, con saldo de una de las víctimas muerta por asfixia.
El nuevo caso ocurrió en las primeras horas de este martes, cuando cuatro sujetos se introdujeron a un predio del centro de Ucú, propiedad de la pareja afectada.
Los dueños de la casa, identificados como Wilbert Pinto Novelo, de 64 años de edad, y su esposa Ada Lucía Salazar, de 62, descubrieron a los ladrones, que al verlos los sometieron y amarraron de pies y manos. No conformes, los amordazaron con trapos en la boca.
Los sujetos se llevaron todo lo que encontraron de valor y se dieron a la fuga.
Como pudo, la señora Ada Lucía se liberó y avisó a sus familiares que viven al lado.
Cuando los parientes entraron vieron inconsciente al señor Wilbert Pinto.
Cuando llegaron las autoridades constataron que había muerto, al parecer porque los trapos con que lo amordazaron le obstruyeron las vías respiratorias.
El caso recuerda al que ocurrió a principios de mes en la avenida Colón, donde dos sujetos que ya están detenidos y procesados penalmente asaltaron al violinista Juan Campos Casares, de 91 años, y a su esposa Lucely Peniche Pasos, de 87.
Parece que el mal ejemplo comienza a cundir en Yucatán, pues igual que ocurrió hace dos semanas en una casona de la avenida Colón, de nuevo ladrones asaltaron a una pareja de la tercera edad, ahora en el centro de Ucú, con saldo de una de las víctimas muerta por asfixia.
El nuevo caso ocurrió en las primeras horas de este martes, cuando cuatro sujetos se introdujeron a un predio del centro de Ucú, propiedad de la pareja afectada.
Los dueños de la casa, identificados como Wilbert Pinto Novelo, de 64 años de edad, y su esposa Ada Lucía Salazar, de 62, descubrieron a los ladrones, que al verlos los sometieron y amarraron de pies y manos. No conformes, los amordazaron con trapos en la boca.
Los sujetos se llevaron todo lo que encontraron de valor y se dieron a la fuga.
Como pudo, la señora Ada Lucía se liberó y avisó a sus familiares que viven al lado.
Cuando los parientes entraron vieron inconsciente al señor Wilbert Pinto.
Cuando llegaron las autoridades constataron que había muerto, al parecer porque los trapos con que lo amordazaron le obstruyeron las vías respiratorias.
El caso recuerda al que ocurrió a principios de mes en la avenida Colón, donde dos sujetos que ya están detenidos y procesados penalmente asaltaron al violinista Juan Campos Casares, de 91 años, y a su esposa Lucely Peniche Pasos, de 87.
