Noticias de Yucatán
(Proceso).- Desde el pasado 23 de junio César
Duarte, exgobernador priista de Chihuahua acusado de delitos electorales, está
prófugo; el principal obstáculo para detenerlo ha sido la Subprocuraduría
Jurídica y de Asuntos Internacionales de la Procuraduría General de la
República (PGR) encabezada hasta octubre por el actual encargado de despacho de
la institución, Alberto Elías Beltrán.
Pese a que la Fiscalía Especializada Para la Atención de
Delitos Electorales (FEPADE) pudo armar un expediente sólido y girar las
órdenes de aprehensión contra Duarte y seis funcionarios más de su gobierno
–por peculado electoral y por haber desviado hacia el PRI aportaciones de los
trabajadores por 79 millones de pesos–, la subprocuraduría encabezada por Elías
Beltrán no ha emitido la solicitud de extradición.
El pasado 12 de septiembre el entonces titular de la
FEPADE, Santiago Nieto Castillo, le pidió a Elías Beltrán que solicitara la
extradición de Duarte. No lo hizo. Tampoco hizo caso a las 10 denuncias
presentadas por la Fiscalía General del Estado de Chihuahua, que acusan a
Duarte, entre otros delitos, del desvío de mil 200 millones de pesos y
recientemente por el de 250 millones de pesos, mediante la triangulación de
fondos públicos recibidos por la Secretaría de Hacienda, cuando la encabezaba
Luis Videgaray, y destinados a la dirigencia nacional del PRI, con Manlio Fabio
Beltrones como presidente del tricolor.