Un policía militar de Brasil ingresó a un local de comida rápida para golpear a la dueña porque se equivocó con su pedido a domicilio.
Augusto Santana, de 34 años, se molestó cuando descubrió que su pedido de tres hamburguesas venían todas aderezadas con salsa BBQ, cuando él había solicitado que una llevara únicamente mayonesa.
Las cámaras de seguridad de Nubia Lanches, en el barrio de Jacarepaguá, en la zona oeste de Río de Janeiro, captaron el momento en que Santana ingresó al local, sacó un arma y apuntó a dos repartidores que se encontraban en la parte delantera del restaurante.
Después, caminó hacia la caja del local, en donde se encontraba Liz Pacheco, de 24 años, y tras intercambiar unas palabras comenzó a golpearla y posteriormente la tomó del cabello y la arrastró por el suelo. Mientras la arrastraba por el local, el policía siguió golpeando a Pacheco con la pistola y le pateó las costillas.
"Él tenía el arma apuntándome todo el tiempo, y todo lo que podía pensar era que iba a morir debido a una confusión sobre un pequeño paquete de salsa", narró Liz Pacheco a medios locales.
La dueña del local contó que estaba en estado de 'shock' cuando el agresor se fue. "Nunca antes me había pasado algo así en todos los años que llevamos dirigiendo el restaurante", dijo.
Tras la agresión, ocurrida el 21 de marzo pasado, Santana se enfrenta a una pena de prisión de 8 años y 6 meses. El juez Caio David calificó al agresor como una "persona peligrosa" que cometió un crimen "cobarde", según recogió el rotativo Daily Mail.
Pacheco se recupera de varias fracturas en el cuerpo y está bajo terapia psicológica tras la agresión sufrida.