En 2022, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) becó a 2 mil 480 estudiantes para cursar alguna maestría, doctorado o especialidad en el extranjero, lo que representa una caída de 40% con respecto al 2018 cuando se entregaron 4 mil 91.
Según el padrón de beneficiarios del Conacyt, ésta es la mayor disminución de becas otorgadas en la administración al extranjero, pues en 2021 se dieron 2 mil 805, en 2020, 3 mil 709, y en 2019, 4 mil 93.
Las becas para estancias posdoctorales al extranjero también sufrieron un desplome al pasar de 490 en 2018, a 74 en 2022, lo que significa una reducción de 84.8%
En cuanto a las estancias sabáticas en instituciones nacionales y del extranjero se registró una disminución de 57.7 entre 2018 y 2022 al pasar de 265 a 112.
De acuerdo el padrón del Conacyt, las becas de repatriación pasaron de 41 en el periodo de enero a diciembre de 2018 a solo 8 de enero a diciembre de 2022, lo que equivale a una reducción de 80.4%
Respecto al monto que reciben los estudiantes que viajan al extranjero se ha mantenido sin aumentos en los últimos años
Para la Unión Europea los solteros reciben mensualmente mil 90 euros y los casados mil 362; para Reino Unido los solteros 770 libras y los casados 963 mientras que va el resto del mundo los solteros mil 100 dólares y los casados mil 375
Brenda Valderrama, investigadora del instituto de Biotecnología de la UNAM, advirtió que lo que demuestran estos números es el cambio de paradigma del concepto de becario a beneficiario de programas sociales y no de cuadros en formación para actividades de alta especialización
Lo que se está buscando es orientar a todos los jóvenes que quieran obtener una beca a afiliarse a los programas gubernamentales que están más vinculados con lo que es un programa de beneficio social que con un programa de desempeño académico".
Y esto es como abrir la cartera pero no enseñarles a trabajar, en realidad el problema que vamos a tener es dentro de 5, 10 años no más, de una cohorte completa de jóvenes que no van a estar capacitados para contender con el mundo moderno, les estamos desincentivado que entren a licenciatura, les estamos desincentivando que entren a carreras científicas, les estamos desincentivando que se vuelvan personas productivas y con metas de calidad y eso a la larga va a ser un problema gravísimo para el país, porque si de por sí ya traíamos una brecha generacional muy profunda, cuando se muera la generación que está ahorita, que tiene 60 años, 70 años, vamos a haber dejado un vacío enorme en la comunidad científica mexicana, porque no estamos formando cuadros, los que formamos durante muchos años se fueron al extranjero por falta de empleo y ahora ni siquiera los estamos formando", alertó.
Ilustración de una persona que se toma la cabeza en signo de desesperación.
*Ilustración: Abraham Cruz.
Para la también integrante de la Academia de Ciencias de Morelos, con estas reducciones se les está “atrofiando” la brújula a los estudiantes.
Antes era muy claro que los estudiantes de posgrado tenían que cumplir con ciertos requisitos de calidad y de desempeño y ahora ya no, y no saben para dónde y no sabrían los investigadores para dónde ir”, expuso.
En entrevista con Excélsior, Valderrama explicó que para los jóvenes siempre es fundamental viajar al extranjero para realizar estancias porque aprenden cosas nuevas que en México no pueden debido a que no se cuenta con los recursos o la infraestructura.
Y no solamente nuevas áreas y disciplinas, sino también nuevas formas de involucramiento, hacer redes en el extranjero y tener acceso a ideas novedosas, realmente todos los investigadores hemos pasado y pasamos periodos en el extranjero. No estamos aislados y no debemos estar aislados, por eso es muy preocupante que se hayan suspendido también parcialmente los apoyos, lo que eran las becas mixtas y las becas al extranjero para que los jóvenes puedan adquirir esa experiencia en buen momento”, dijo.
En este contexto, la investigadora externó su preocupación por el hecho de que se están dejando de formar jóvenes bajos criterios científicos, tratando de reinventar la ciencia mexicana.
Con información de Laura Toribi / Excelsior