Noticias de Yucatán
El cierre del año y el movimiento económico en torno a él ha hecho más evidentes los lunares del Centro Histórico de Mérida.
Con el aumento de vendedores ambulantes en primer lugar —a pesar de las afirmaciones de que el problema está bajo control—, antiguos vicios heredados a la actual administración municipal se desbordan en estos días junto con la elevada circulación de gente en las calles del primer cuadro de la capital yucateca.
Uno de esos lunares es la prostitución, que no sólo no cede sino que ve engrosar sus filas con mujeres que llegan de otros puntos a ofrecer sus servicios a esta ciudad.
Un caso que llama la atención es el de un negocio, llamado “Posada San José”, que fue clausurado en agosto y reabrió sus puertas en condiciones que se desconocen.
Ya no es raro ver a mujeres de otros países que se dedican a la prostitución en Mérida.¿Parte de una red?
En buena medida son personas que llegan de Centroamérica y antes pasaron por Campeche y Chiapas. Son tema de un reportaje que publicaremos próximamente. Megamedia.
En medio del aumento de pequeños hoteles en una zona del Centro Histórico, por lo menos un establecimiento que fue clausurado a fines de la administración municipal pasada por operar en forma irregular como motel “de paso” reabrió sus puertas en las mismas condiciones que originaron su cierre.
El establecimiento se denomina “Posada San José” y se ubica en la calle 60 entre 69 y 71. Fue clausurado el 10 de agosto por personal del Ayuntamiento, al igual que otros dos locales del rumbo de San Cristóbal que se hacían llamar “posadas”, debido a que su licencia de funcionamiento no coincidía con los giros a los que se dedicaba.
El cierre se concretó poco después de que este periódico publicó amplia información de la prostitución en el primer cuadro, como parte de un reportaje sobre los lunares del Centro Histórico. En esa ocasión la clausura abarcó a “Posada San José”, “La primera de San Cristóbal” y un local sin nombre en la calle 69 entre 50 y 52.
Personal de la Dirección de Desarrollo Urbano, de Protección Civil y de la Policía Municipal constató la violación de leyes y reglamentos del municipio.
Con el cambio de administración, en octubre, la situación cambió. En los primeros días de noviembre, los sellos de clausura de “Posada San José” fueron retirados y el negocio reabrió sus puertas. Reporteros de este periódico constataron que la única diferencia en relación con el panorama previo al cierre forzado es que las sexoservidoras ya no permanecen en la puerta. Ahora están sentadas en el interior, junto a un sastre —José, al parecer responsable del establecimiento— y su máquina de coser. Son visibles desde el exterior, así que los clientes acceden sin mayores contratiempos a solicitar sus servicios.
Al frente del local está, como antes de la clausura, un pequeño estanquillo que sirve como mero disfraz. En la planta alta hay cuartos que utilizan las sexoservidoras y sus clientes.
Con el antecedente de su cierre por irregularidades en las licencias de funcionamiento, se solicitó a la autoridad información sobre la reapertura. Personal de la Dirección de Gobernación de la Comuna indicó que, hasta donde sabe, el negocio pagó multas. Remitió a la Dirección de Desarrollo Urbano, por ser de su competencia.
La semana pasada, en una visita al parque Animaya, se planteó nuestra solicitud a César Bojórquez Zapata, coordinador general de Funcionamiento Urbano, en cuya jurisdicción recae Desarrollo Urbano. El ex alcalde instruyó a una auxiliar para que le reuniera datos de las publicaciones, a fin de que se enterara con detalle.
Lo cierto es que la “posada” funciona en situación similar a la que prevalecía hace unos meses.
A escasa distancia, en la calle 58, hay otros locales que, aunque son centros de prostitución, sí tienen licencia de hotel.
Prostitución Detalles
La práctica de la prostitución no es delito en México, pero sí algunos actos que la rodean.
De paso
En varias partes de Mérida, como el Centro Histórico, operan locales que, con uso de suelo distinto, se dedican a la renta de cuartos para el encuentro de sexoservidoras y sus clientes.
Al fin los vieron
Poco antes de finalizar la gestión municipal de Renán Barrera Concha, el Ayuntamiento clausuró tres negocios que funcionaban en esas condiciones desde años atrás, sin que ninguna autoridad se “percatara” de lo que ocurría.
Igual que antes
Por lo menos uno de esos locales reabrió sus puertas a escasas semanas del inicio de la actual administración, en las mismas condiciones que ocasionaron su clausura.
Lo hacen, pero “legal”
En la calle 58 hay negocios que sí cuentan con permiso de hoteles.
El cierre del año y el movimiento económico en torno a él ha hecho más evidentes los lunares del Centro Histórico de Mérida.
Con el aumento de vendedores ambulantes en primer lugar —a pesar de las afirmaciones de que el problema está bajo control—, antiguos vicios heredados a la actual administración municipal se desbordan en estos días junto con la elevada circulación de gente en las calles del primer cuadro de la capital yucateca.
Uno de esos lunares es la prostitución, que no sólo no cede sino que ve engrosar sus filas con mujeres que llegan de otros puntos a ofrecer sus servicios a esta ciudad.
Un caso que llama la atención es el de un negocio, llamado “Posada San José”, que fue clausurado en agosto y reabrió sus puertas en condiciones que se desconocen.
Ya no es raro ver a mujeres de otros países que se dedican a la prostitución en Mérida.¿Parte de una red?
En buena medida son personas que llegan de Centroamérica y antes pasaron por Campeche y Chiapas. Son tema de un reportaje que publicaremos próximamente. Megamedia.
En medio del aumento de pequeños hoteles en una zona del Centro Histórico, por lo menos un establecimiento que fue clausurado a fines de la administración municipal pasada por operar en forma irregular como motel “de paso” reabrió sus puertas en las mismas condiciones que originaron su cierre.
El establecimiento se denomina “Posada San José” y se ubica en la calle 60 entre 69 y 71. Fue clausurado el 10 de agosto por personal del Ayuntamiento, al igual que otros dos locales del rumbo de San Cristóbal que se hacían llamar “posadas”, debido a que su licencia de funcionamiento no coincidía con los giros a los que se dedicaba.
El cierre se concretó poco después de que este periódico publicó amplia información de la prostitución en el primer cuadro, como parte de un reportaje sobre los lunares del Centro Histórico. En esa ocasión la clausura abarcó a “Posada San José”, “La primera de San Cristóbal” y un local sin nombre en la calle 69 entre 50 y 52.
Personal de la Dirección de Desarrollo Urbano, de Protección Civil y de la Policía Municipal constató la violación de leyes y reglamentos del municipio.
Con el cambio de administración, en octubre, la situación cambió. En los primeros días de noviembre, los sellos de clausura de “Posada San José” fueron retirados y el negocio reabrió sus puertas. Reporteros de este periódico constataron que la única diferencia en relación con el panorama previo al cierre forzado es que las sexoservidoras ya no permanecen en la puerta. Ahora están sentadas en el interior, junto a un sastre —José, al parecer responsable del establecimiento— y su máquina de coser. Son visibles desde el exterior, así que los clientes acceden sin mayores contratiempos a solicitar sus servicios.
Al frente del local está, como antes de la clausura, un pequeño estanquillo que sirve como mero disfraz. En la planta alta hay cuartos que utilizan las sexoservidoras y sus clientes.
Con el antecedente de su cierre por irregularidades en las licencias de funcionamiento, se solicitó a la autoridad información sobre la reapertura. Personal de la Dirección de Gobernación de la Comuna indicó que, hasta donde sabe, el negocio pagó multas. Remitió a la Dirección de Desarrollo Urbano, por ser de su competencia.
La semana pasada, en una visita al parque Animaya, se planteó nuestra solicitud a César Bojórquez Zapata, coordinador general de Funcionamiento Urbano, en cuya jurisdicción recae Desarrollo Urbano. El ex alcalde instruyó a una auxiliar para que le reuniera datos de las publicaciones, a fin de que se enterara con detalle.
Lo cierto es que la “posada” funciona en situación similar a la que prevalecía hace unos meses.
A escasa distancia, en la calle 58, hay otros locales que, aunque son centros de prostitución, sí tienen licencia de hotel.
Prostitución Detalles
La práctica de la prostitución no es delito en México, pero sí algunos actos que la rodean.
De paso
En varias partes de Mérida, como el Centro Histórico, operan locales que, con uso de suelo distinto, se dedican a la renta de cuartos para el encuentro de sexoservidoras y sus clientes.
Al fin los vieron
Poco antes de finalizar la gestión municipal de Renán Barrera Concha, el Ayuntamiento clausuró tres negocios que funcionaban en esas condiciones desde años atrás, sin que ninguna autoridad se “percatara” de lo que ocurría.
Igual que antes
Por lo menos uno de esos locales reabrió sus puertas a escasas semanas del inicio de la actual administración, en las mismas condiciones que ocasionaron su clausura.
Lo hacen, pero “legal”
En la calle 58 hay negocios que sí cuentan con permiso de hoteles.