Ante la tibieza y el tortuguismo que demuestra el presidente del Tribunal, Edmundo Alzina Campos, la maestra Niño Díaz promovió nuevo amparo y una queja donde informa a la representación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que aún no cumplen su sentencia que, como ya informamos, consiste en la restitución de su cargo de jefa de Sector de Preescolar de la Secretaría de Educación del Estado (SEE).
"La directora de Educación Inicial y Preescolar, Natividad Novelo Pérez, ya me giró nuevos oficios para que supuestamente me den posesión, pero no es la forma jurídica como lo hace", indicó la entrevistada. "Así como se hizo el acta donde me devolvieron el dinero que me descontaron, así tiene que ser la restitución de mi cargo".
Relató que el actuario del Tribunal debe atestiguar su restitución y levantar un acta laboral para que el acto tenga fe pública. Deben asistir el apoderado jurídico de la SEE, Miguel Ángel Tenreiro Cámara, o su representante y otro de la Contraloría para que atestigue la entrega-recepción de la oficina.
La maestra Niño Díaz se desempeñaba como jefa del Sector V y sancionó a tres supervisoras por faltas normativas. Las castigadas recurrieron a la entonces directora de Preescolar, Sonia Ruiz Novelo, y ésta la destituyó y comisionó desde hace cinco años en una oficina de Programas Estratégicos. Además, le aplicó sanciones económicas por $18,544 y le levantó varias actas.
Todo ese castigo laboral lo avaló el Tribunal de Conciliación, pero la maestra promovió un amparo, cuyo magistrado federal revocó el fallo y ordenó que le restituyeran todos sus derechos y los descuentos en septiembre de 2010.
Denuncia tibieza una profesora "castigada"
05 febrero 2011
9:09:00 a.m.
abuso, educación, ilegalidad, injusticia
Noticias de Yucatán
(abuso, injusticia, ilegalidad, educación)
5 febrero 2011
Promueve un nuevo amparo, pues aún no la restituyen
El Tribunal de Conciliación y Arbitraje al Servicio de los Trabajadores del Estado está en una postura muy tibia y tolera el desacato a la ley, manifestó ayer la maestra Sara María Niño Díaz, quien ganó un amparo federal que aún no se cumple.