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El gobierno de Ivonne Ortega Pacheco habría engañado a los diputados de la anterior Legislatura al solicitarles autorización para construir hospitales bajo el esquema de Proyecto de Prestación de Servicios que, en el caso del de Ticul, les dijo, sería de 60 camas y costaría $300 millones.
Apenas recibió el permiso de los diputados, Ortega Pacheco y sus funcionarios cambiaron las cosas y firmaron un contrato para levantar un hospital de 90 camas a un costo de construcción de casi mil millones de pesos y la concesión para operarlo 25 años por 5,570 millones, revela un informe de Mayaleaks. - See more at: http://yucatan.com.mx/merida/gobierno-merida/engano-por-un-hospital#sthash.k537NesE.dpuf
El gobierno de Ivonne Ortega Pacheco habría engañado a los diputados de la anterior Legislatura al solicitarles autorización para construir hospitales bajo el esquema de Proyecto de Prestación de Servicios que, en el caso del de Ticul, les dijo, sería de 60 camas y costaría $300 millones.
Apenas recibió el permiso de los diputados, Ortega Pacheco y sus funcionarios cambiaron las cosas y firmaron un contrato para levantar un hospital de 90 camas a un costo de construcción de casi mil millones de pesos y la concesión para operarlo 25 años por 5,570 millones, revela un informe de Mayaleaks. - See more at: http://yucatan.com.mx/merida/gobierno-merida/engano-por-un-hospital#sthash.k537NesE.dpuf
Obra con costos inflados
Hermetismo sobre nuevos plazos para el hospital de Ticul
La construcción del Hospital Regional de Ticul, anunciada por Ivonne Ortega Pacheco en 2012, está paralizada desde hace meses al parecer por desacuerdos en el monto del contrato entre el gobierno de Rolando Zapata y la empresa contratista Infraestructura Hospitalaria de la Península (IHP), denuncia Mayaleaks.
Ese hospital corre el riesgo de convertirse en otro “elefante blanco”, como el de Tekax, que se quedó a medio construir, dice.
Mayaleaks, creado este año por siete organizaciones cívicas con el objeto de realizar investigaciones sobre las áreas de opacidad de los gobiernos, dice en un reciente reporte sobre el hospital de Ticul, que para destrabar el asunto, la administración de Zapata Bello entregó una “carta de términos” a los socios de la empresa constructora con la aparente intención de modificar algunas cláusula del contrato original del Proyecto de Prestación de Servicios (PPS).
Los socios, añade, debieron de aceptar o rechazar el contenido de esa carta el jueves, en una reunión convocada expresamente en la ciudad de México.
Según Mayaleaks, ahora se sabe que el consorcio empresarial al que pertenece la compañía constructora del hospital de Ticul, Grupo Marhnos, firmó también, en noviembre de 2010, un contrato similar con el Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios, cuando Enrique Peña Nieto era el gobernador de este estado, para construir, igualmente con un PPS, el Hospital Regional de Tlalnepantla y operarlo durante 25 años. Las obras de ese hospital empezaron en marzo de 2011 y terminaron en agosto de 2012.
Ivonne Ortega era en esta época una fuerte aliada del gobernador mexiquense, en su lucha por la candidatura presidencial del PRI.
El organismo cívico recuerda que la ex gobernadora, dos semanas antes de terminar su gestión, el 12 de septiembre de 2012, obligó a Servicios de Salud de Yucatán a firmar un contrato de tipo PPS con Infraestructura Hospitalaria de la Península, subsidiaria del Grupo Marhnos.
En ese contrato, la empresa se compromete a diseñar, edificar, equipar y mantener ese hospital a cambio de una contraprestación de 5,571 millones 568,000 pesos, pagaderos a 25 años.
Cambio de fecha
Aunque la fecha de entrega del hospital sería marzo de 2014, ambas partes movieron la fecha al 15 de enero de 2015, sin explicación pública alguna, aunque esta vez tampoco cumplieron con el plazo.
Según el contrato -una parte de él aparece en varios informes entregados a la Bolsa Mexicana de Valores por los propios socios de la empresa- la construcción del hospital “deberá llevarse a cabo en un plazo máximo de dieciocho meses”, ya que se prevé la rescisión del mismo “si existiera un retraso mayor a tres meses en la terminación de la obra”.
Hasta septiembre de 2014, el grado de avance del hospital era del 37%, según esos informes entregados a la BMV, que los recibe porque el principal socio de Infraestructura Hospitalaria de la Península, el Fideicomiso Irrevocable de Emisión, Administración y Pago F/422, emite Certificados Bursátiles Fiduciarios para obtener fondos que, a su vez, son regulados por la Bolsa de Valores.
Aunque el gobierno del Estado mantiene total hermetismo sobre los plazos de construcción del hospital y los términos del contrato -incluso le negó a Mayaleaks copia del contrato con IHP solicitada a través de la Unidad de Acceso a la Información- la red de investigadores de este organización cívica confirmó que el jueves 29 de enero a las 11 horas, en las oficinas ubicadas en Lafayette número 40, colonia Anzures, de la ciudad de México, los socios de ese Fideicomiso, que acapara el 70 por ciento de las acciones de IHP, se reunieron para decidir si aprueban o no la celebración de una “carta de términos” con el gobierno de Yucatán, respecto al hospital de Ticul.
Hasta el momento no se saben los resultados de esa reunión, dice Mayaleaks, en su portal de internet (mayaleaks.org.mx).
Independientemente del contenido de esa carta, añade, documentos oficiales de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público demuestran que desde el primer año del gobierno de Rolando Zapata se cambiaron algunos términos del contrato original.
Fondo comprometido
Por ejemplo, explica, en el Registro de Obligaciones y Empréstitos de Entidades y Municipios de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público de 2013 se asienta que Servicios de Salud de Yucatán había comprometido una parte de las participaciones federales del Estado en los próximos 25 años, para realizar el pago de los casi 5,572 millones de pesos, a valor neto presente, a razón de $185 millones al año.
“El gobierno estatal notificó a la SHCP ese año que la inversión realizada para la construcción del Hospital Regional de Ticul ascendería a $1,300 millones, incluidos en la suma total de los $5,572 millones, mismos que se pagarían por concepto de construcción del hospital y por su operación y mantenimiento durante 25 años”.
El informe de Mayaleaks dice también lo siguiente:
-Desde la primera vez que se informó del proyecto del hospital, funcionarios y empresarios hablaron de una inversión de $1,300 millones en la construcción del edificio.
-El 25 de septiembre, durante una visita de Ivonne Ortega a Ticul, para anunciar las obras, el director de Infraestructura de Grupo Marhnos, José Manuel Fortes Méndez, declaró que, en efecto, la obra costaría esa cantidad.
-A fines de 2013, empero, esa cifra cambió a $948.8 millones, una diferencia de $351.2 millones (27%), y así se asentó en el Registro de Obligaciones de la Secretaria de Hacienda y Crédito Público.- HERNÁN CASARES CÁMARA
De un vistazo
Cambio
Grupo Marhnos, sin embargo, en su página de internet cambió la información que dio en 2012 y ahora dice que el diseño y construcción del hospital de Ticul costaría $1,100 millones, señala Mayaleaks.
Superficie
En esa misma página, http://www.marhnos.com.mx /marhnos_infraestructura.html), Marhnos precisa que la superficie de construcción del hospital será de 23,000 metros cuadrados, cuando en el contrato original se habla de 26,000 metros según la información de IHP remitida a la BMV.
Tlalnepantla
Otro indicio de que Marhnos habría inflado los costos del hospital de Ticul sería que el presupuesto de construcción del hospital de Tlalnepantla, realizado por esa compañía entre 2011 y 2012, fue de $800 millones, pese a que su superficie construida es de 42,000 metros, casi el doble de lo que tendría el de Ticul, aunque éste costaría, según la última estimación, $150 millones más.
- See more at: http://yucatan.com.mx/merida/gobierno-merida/obra-con-costos-inflados#sthash.QYriWgN7.dpufEngañan a los diputados
Ivonne Ortega les esconde datos del hospital de Ticul
El gobierno de Ivonne Ortega Pacheco firmó un Contrato de Prestación de Servicios (CPS) con la empresa Marhnos, en septiembre de 2012, para construir el hospital de Ticul de 90 camas a un costo de $948 millones, cuando funcionarios de esa administración, un año antes, hicieron creer al Congreso, cuya aprobación es indispensable para ese tipo de contratos, que el hospital sería de 60 camas y costaría ¡300 millones!
Con esta información, los integrantes de la LX Legislatura, de mayoría priista, emitieron un dictamen que autorizó al gobierno a firmar ese contrato y garantizar su pago durante 25 años.
De acuerdo con la Ley de Proyectos para la Prestación de Servicios del Estado de Yucatán, los contratos de este tipo requieren la aprobación de la mayoría de los diputados del Congreso y éstos autorizaron la construcción y operación del hospital de Ticul y de dos más, bajo el esquema de PPS, sin conocer su tamaño y su costo, revela Mayaleaks, en un informe sobre el tema divulgado recientemente en su portal de internet.
Engatusar
Como ya informamos, Ivonne Ortega firmó con Infraestructura Hospitalaria de la Península, filial del Grupo Marhnos, un CPS por cinco mil 571.5 millones de pesos para la operación y mantenimiento del hospital de Ticul durante 25 años, incluyendo la construcción del edificio, con capacidad para 90 camas.
El contrato no precisa el costo de la construcción del edificio, pero el gobierno del Estado ha dicho que es de $948.8 millones y la empresa, de $1,150 millones, incluidos en los cinco mil 571.5 millones del CPS. Este comprende los gastos de operación del hospital durante cinco lustros.
En su informe, Mayaleaks afirma que el 21 de septiembre de 2011, tres altos funcionarios de Ivonne Ortega, el secretario de Planeación, Ulises Carrillo Cabrera; el consejero jurídico, Sergio Cuevas González y el secretario de Salud, Álvaro Quijano Vivas, se reunieron con los diputados en la sede del Congreso, para entregarles y explicarles la iniciativa de “Decreto de autorización para la realización del Programa de Impulso a la Infraestructura y Servicios de Salud de Yucatán a través del esquema de Proyectos para la Prestación de Servicios”.
En esa iniciativa, firmada por la gobernadora, se pedía permiso para realizar “el desarrollo y licitación, conjunta o separadamente, de hasta tres centros hospitalarios en Mérida, Tizimín y Ticul”.
En la exposición de motivos, la gobernadora explica ante la falta de infraestructura hospitalaria es necesario construir esos tres nuevos hospitales con las siguientes características: en Mérida, un Materno Infantil de hasta 160 camas; en Valladolid, un General de hasta 60 camas y en Ticul otro General, también “de hasta 60 camas”.
Al salir del Congreso, en rueda de prensa, Quijano Vivas amplió esa información y específicamente en relación al hospital de Ticul confirmó que tendría 60 camas y costaría $300 millones.
El primero de marzo de 2012, seis meses después de estas declaraciones, la mayoría priista aprobó la emisión del Decreto 503, que permite la construcción de los tres hospitales bajo el esquema de Proyecto de Prestación de Servicios.
¿Y el Congreso?
El gobierno de Ivonne Ortega, añade Mayaleaks, solo esperó esta autorización para cambiar las cosas, sin explicar las causas. Poco después de publicado el decreto 503, firmó el contrato para construir un hospital de 90 camas, no de 60; y no por $300 millones, sino por el triple: $948.8 millones, una cifra que nunca conocieron los diputados.
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