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La futura presidenta del DIF municipal, María Eugenia Ortiz Abraham, considera positivo que ese cargo público simbólico no sea remunerado y ve bien que no haya salario para quien desempeñe ese puesto honorario que realizará ella.
“Servir a los demás, ayudar a la gente desprotegida, no es un trabajo sino un privilegio”, expresó.
También informó que la semana entrante asumirá formalmente esa responsabilidad y conocerá a fondo los programas y acciones que realiza esa institución, la cual, como ya informamos, tiene nueva directora, ella es Loreto Villanueva Trujillo.
La señora Ortiz Abraham, joven profesional titulada en Administración, habló sobre su cargo en breve entrevista que se le hizo en la comisaría de Yaxnic, donde participó con su esposo, el alcalde Mauricio Vila Dosal, y otros funcionarios más, en el comienzo de un plan de participación ciudadana que el Ayuntamiento llevará a las poblaciones del municipio.
“Todavía me estoy acoplando a esta responsabilidad”, dijo al referirse a los sentimientos que genera en ella el peso de ser la presidenta del DIF municipal.
“Me siento emocionada y también entusiasmada por lo que vendrá”, agregó.
Anticipó que el miércoles se reunirá con el personal del DIF para conocerlo y saber qué hacen.
Compaginar cargo y familia, meta de la titular del DIF
Respecto a los cambios que traerá en su vida asumir la presidencia del DIF municipal, la señora María Eugenia Ortiz Abraham de Vila anticipó que intentará continuar, hasta donde sea posible, con sus actividades normales en el hogar y la familia.
Recordó que el matrimonio Vila-Ortiz tiene dos hijos pequeños, de uno y dos años de edad. El mayor fue inscrito hace poco a una guardería.
“Procuraré que este cambio (el cargo) no afecte la normalidad en nuestro hogar, sobre todo en la atención de nuestros hijos”, dijo.
Entrevistada, comentó que todavía no puede hablar de sus planes al frente del DIF, pues primero quiere conocer bien a esa institución. Por ahora sólo ha leído sobre los programas que tiene ese organismo y revisó los informes de su antecesora, Diana Castillo Laviada.
Anticipó que, como parte de ese proceso, el miércoles 16 se reunirá con el personal de esa oficina para conocerlos y saber qué hacen.
Luego manifestó que no es tan ajena al trabajo a favor de las familias desamparadas, ya que cuando ella cursó la universidad eligió realizar su servicio social en “Ciudad Vicentina”, un albergue para adultos enfermos o con dispacidad que se encuentran en situación vulnerable.
“En el tiempo que colaboré con esa institución, me pidieron usar mis conocimientos sobre administración para diseñar estrategias que permitieran aumentar la recaudación de fondos para el funcionamiento del albergue”, abundó. “Como parte de ese trabajo elaboramos un manual administrativo, folletos informativos para posibles donantes y otras acciones para difundir más el trabajo que ahí se realiza”.
El reportero le recordó que el cargo de presidenta del DIF Municipal es honorario y sin salario alguno.
“¡Me parece muy bien!”, expresó la joven madre. “La verdad, no veo por qué un cargo que es honorario deba ser remunerado. Servir a los demás, ayudar a la gente desprotegida no es un trabajo, sino un privilegio”.
María Eugenia Ortiz también señaló que en su familia no hay antecedentes de alguien que haya ocupado un cargo público. Ella no considera que el puesto que ocupará en el DIF caiga en esa categoría.
“Hasta ahora el único integrante de mi familia que ha llegado a un puesto público es mi esposo”, expresó.
