Noticias de Yucatán
La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) inició hace unas semanas una estrategia de seguridad en el interior del Estado, en especial en municipios del sur, donde tienen altos índices delictivos.
La finalidad es inhibir la delincuencia y evitar ilícitos relacionados con el consumo de alcohol y pandillerismo.
La estrategia se llama “Vigilancia seccional” y concentra a la Policía Estatal Coordinada y a la Policía Municipal Coordinada. Éstas se reúnen los fines de semana para recorrer en convoyes varios municipios.
La operación estatal se divide en 10 secciones y está enfocada a labores de prevención. Esto permite que cuando ocurre un hecho delictivo en algún municipio, en cuestión de minutos se pida apoyo a las localidades cercanas para la búsqueda de sospechosos, de ser el caso.
La operación es coordinada por la Policía Estatal Coordinada, perteneciente a la SSP.
Acorde con los datos, la movilización ocurre de viernes a domingo (días en los que ocurre cerca del 80% de los delitos en poblaciones del interior del Estado por el consumo de alcohol).
En la zona noreste se encuentran Baca, Mocochá, Ixil, Chicxulub Pueblo, Conkal y Dzemul. Las patrullas de las corporaciones municipales y de la Policía Estatal coordinada realizan recorridos en convoy y retiran a las personas que beben alcohol en la vía pública, así como a los grupos de jóvenes reunidos luego de las 11 de la noche.
Se dijo que en esa sección ha disminuido más del 50% de los hechos delictivos por robo, daño en propiedad ajena y riñas.
En la sección sur del estado, donde se concentran cuatro de los municipios con los mayores índices delictivos, la vigilancia es reforzada por la Policía Estatal Coordinada, la policía peninsular y unidades de Goera, así como patrullas de las policías municipales de Peto, Ticul, Oxkutzcab, Tekax y Tzucacab. La encomienda es reducir los índices delictivos y reducir los problemas por pandillerismo.
Una fuente reveló que tras el homicidio de un joven ocurrido hace poco más de un mes, a partir de las 11:30 de la noche hay “toque de queda” para los jóvenes.
“A los grupos que se encuentren se les revisa y en caso de que tengan algo prohibido se les detiene, de estar limpios se les retira”, dijo.
A inicios de la semana pasada, en un esfuerzo por disminuir los índices delictivos, el fiscal general Ariel Aldecua Kuk se reunió con 69 alcaldes, jefes de las policías municipales y jueces de paz para desarrollar programas de prevención en sus respectivas poblaciones.
La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) inició hace unas semanas una estrategia de seguridad en el interior del Estado, en especial en municipios del sur, donde tienen altos índices delictivos.
La finalidad es inhibir la delincuencia y evitar ilícitos relacionados con el consumo de alcohol y pandillerismo.
La estrategia se llama “Vigilancia seccional” y concentra a la Policía Estatal Coordinada y a la Policía Municipal Coordinada. Éstas se reúnen los fines de semana para recorrer en convoyes varios municipios.
La operación estatal se divide en 10 secciones y está enfocada a labores de prevención. Esto permite que cuando ocurre un hecho delictivo en algún municipio, en cuestión de minutos se pida apoyo a las localidades cercanas para la búsqueda de sospechosos, de ser el caso.
La operación es coordinada por la Policía Estatal Coordinada, perteneciente a la SSP.
Acorde con los datos, la movilización ocurre de viernes a domingo (días en los que ocurre cerca del 80% de los delitos en poblaciones del interior del Estado por el consumo de alcohol).
En la zona noreste se encuentran Baca, Mocochá, Ixil, Chicxulub Pueblo, Conkal y Dzemul. Las patrullas de las corporaciones municipales y de la Policía Estatal coordinada realizan recorridos en convoy y retiran a las personas que beben alcohol en la vía pública, así como a los grupos de jóvenes reunidos luego de las 11 de la noche.
Se dijo que en esa sección ha disminuido más del 50% de los hechos delictivos por robo, daño en propiedad ajena y riñas.
En la sección sur del estado, donde se concentran cuatro de los municipios con los mayores índices delictivos, la vigilancia es reforzada por la Policía Estatal Coordinada, la policía peninsular y unidades de Goera, así como patrullas de las policías municipales de Peto, Ticul, Oxkutzcab, Tekax y Tzucacab. La encomienda es reducir los índices delictivos y reducir los problemas por pandillerismo.
Una fuente reveló que tras el homicidio de un joven ocurrido hace poco más de un mes, a partir de las 11:30 de la noche hay “toque de queda” para los jóvenes.
“A los grupos que se encuentren se les revisa y en caso de que tengan algo prohibido se les detiene, de estar limpios se les retira”, dijo.
A inicios de la semana pasada, en un esfuerzo por disminuir los índices delictivos, el fiscal general Ariel Aldecua Kuk se reunió con 69 alcaldes, jefes de las policías municipales y jueces de paz para desarrollar programas de prevención en sus respectivas poblaciones.
