Celso de la Cruz Martín Rodríguez, vecino de Tizimín murió víctima de su afición alcohol, actividad a la que se dedicó todos los días en los últimos 10 años.
Su cuerpo quedó inerte a las puertas de su casa, en la calle 49 entre 44 y 46 de esa ciudad. Celso tenía 46 años de edad.
Nicolás Martín Medina, padre del occiso, informó a las autoridades que su hijo era bebedor consuetudinario y a las 21:00 horas, lo vio tirado en la acera, por lo que pensó que se había quedado dormido embriagándose.
Se acercó a verlo y se percató que no tenía signos vitales. La causa de la muerte fue por cirrosis hepática.
Su cuerpo quedó inerte a las puertas de su casa, en la calle 49 entre 44 y 46 de esa ciudad. Celso tenía 46 años de edad.
Nicolás Martín Medina, padre del occiso, informó a las autoridades que su hijo era bebedor consuetudinario y a las 21:00 horas, lo vio tirado en la acera, por lo que pensó que se había quedado dormido embriagándose.
Se acercó a verlo y se percató que no tenía signos vitales. La causa de la muerte fue por cirrosis hepática.