El aseguramiento de siete cocodrilos de pantano del mini zoológico de Mulsay por parte de la Profepa, debe tener consecuencias contra varios funcionarios municipales, por la ineficiencia mostrada en el manejo de estas especies.
"La resolución de la Profepa confirma los señalamientos de la ciudadanía, que sin ser experta veía las malas condiciones del estanque de los cocodrilos, que estaba lleno de verdín, por lo que esta situación debe ser tomada con responsabilidad por el alcalde Mauricio Vila Dosal", manifestó el coordinador del grupo edilicio del PRI, Rudy Airan Pacheco Aguilar.
"Esperamos que se den sanciones ejemplares para los funcionarios municipales responsables de esta penosa situación que al parecer tendría consecuencias económicas de cientos de miles de pesos contra el erario público".
Dijo que la situación de los reptiles ya se había planteado en la Comisión de Servicios Públicos, donde el edil priista solicitó en su momento, sanciones y consecuencias administrativas para los responsables de esta situación.
"El alcalde ha manifestado públicamente que en su gobierno tendrá mano dura para gobernar. Hoy enfrenta una situación de la cual estaremos muy vigilantes de su actuación, pero sobre todo de las consecuencias administrativas a los funcionarios municipales de primer rango porque el personal operativo de Mulsay no tiene la culpa de esta grave irresponsabilidad".
A través de un comunicado, la Profepa ha dado a conocer a la opinión pública, el aseguramiento de los siete cocodrilos de pantano que están bajo el estatus de especies sujetas a protección especial, que el zoológico de Mulsay incumplió con el protocolo de bioseguridad, por lo que de acuerdo a la Ley General de Vida Silvestre, podría haber sanciones a la comuna meridana de 20 mil a 50 mil veces el salario mínimo vigente en la Ciudad de México.
"Más que una sanción económica, que sería en perjuicio a la ciudadanía, esperamos que esta administración municipal cumpla a la letra los reglamentos que regulan a los zoológicos municipales para evitar situaciones como esta", dijo.
"La resolución de la Profepa confirma los señalamientos de la ciudadanía, que sin ser experta veía las malas condiciones del estanque de los cocodrilos, que estaba lleno de verdín, por lo que esta situación debe ser tomada con responsabilidad por el alcalde Mauricio Vila Dosal", manifestó el coordinador del grupo edilicio del PRI, Rudy Airan Pacheco Aguilar.
"Esperamos que se den sanciones ejemplares para los funcionarios municipales responsables de esta penosa situación que al parecer tendría consecuencias económicas de cientos de miles de pesos contra el erario público".
Dijo que la situación de los reptiles ya se había planteado en la Comisión de Servicios Públicos, donde el edil priista solicitó en su momento, sanciones y consecuencias administrativas para los responsables de esta situación.
"El alcalde ha manifestado públicamente que en su gobierno tendrá mano dura para gobernar. Hoy enfrenta una situación de la cual estaremos muy vigilantes de su actuación, pero sobre todo de las consecuencias administrativas a los funcionarios municipales de primer rango porque el personal operativo de Mulsay no tiene la culpa de esta grave irresponsabilidad".
A través de un comunicado, la Profepa ha dado a conocer a la opinión pública, el aseguramiento de los siete cocodrilos de pantano que están bajo el estatus de especies sujetas a protección especial, que el zoológico de Mulsay incumplió con el protocolo de bioseguridad, por lo que de acuerdo a la Ley General de Vida Silvestre, podría haber sanciones a la comuna meridana de 20 mil a 50 mil veces el salario mínimo vigente en la Ciudad de México.
"Más que una sanción económica, que sería en perjuicio a la ciudadanía, esperamos que esta administración municipal cumpla a la letra los reglamentos que regulan a los zoológicos municipales para evitar situaciones como esta", dijo.