Noticias de Yucatán
Las condiciones en la costa del Golfo de México se deterioraron el viernes a medida que el huracán “Harvey” iba cobrando más fuerza y avanzaba hacia el estado. Los meteorólogos advirtieron que la gente apresurar los preparativos y evacuaciones.
Millones de personas se prepararon para un prolongado azote de la tormenta, que podría ser el huracán más feroz que toca tierra en Estados Unidos en casi 12 años. Los meteorólogos dijeron que “Harvey” conlleva “peligro de muerte” y representan un “grave riesgo”, agregando que podría empapar varios condados ubicados a más de 161 kilómetros de la costa.
Atizada por las aguas tibias del Golfo de México, la tormenta tenía vientos sostenidos de 177 kilómetros por hora (110 mph), un poco menos de lo requerido para convertirse en tormenta de la categoría 3, de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes. Se prevé que pueda fortalecerse antes de tocar la tierra el viernes por la noche o el sábado temprano.
Brock Long, director de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias, dijo que la ventana para las evacuaciones se cerró rápidamente.
“Texas va a ser impactado por un gran huracán”, dijo Long un “Good Morning America”. “Vamos a tener una cantidad significativa de lluvias en los próximos tres días” Van a haber daños “.
Está previsto que “Harvey” toque tierra en la costa central de Texas, entre Port O’Connor y la bahía de Matagorda. Esta es una franja costera de 48 kilómetros (30 millas) a unos 110 kilómetros (alrededor de 70 millas) de Corpus Christi, Texas.
La tormenta tiene el potencial de vientos de 200 kilómetros por hora (125 millas por hora) y olas de hasta 3,6 metros (12 pies) de alto, de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes.
“Harvey” pasó rápidamente el jueves de depresión tropical a huracán de categoría 1. En la madrugada del viernes, el centro actualizó su estatus elevando su peligrosidad en un grado. La última tormenta de igual potencia en Estados Unidos fue el huracán Wilma, que llegó a Florida en octubre de 2005.
La súper tormenta Sandy, que azotó Nueva York y Nueva Jersey en 2012, nunca tuvo vientos tan potentes y perdió su categoría tropical antes de tocar tierra. Sin embargo, causó gran devastación sin haber sido catalogado nunca como importante huracán.
El viernes por la mañana, la tormenta estaba a unos 185 kilómetros (115 millas) al sureste de Corpus Christi, avanzando a 17 kph (10 mph) hacia el noroeste.
Los siete condados costeros de Tejas desde Corpus Christi hasta la extremidad occidental de la isla Galveston ordenaron el desalojo obligatorio de millas de habitantes de las zonas bajas. En cuatro de estos condados, las autoridades ordenaron la evacuación total y advirtieron a los que decidieron quedarse que no son las mujeres el rescate.
AUTORIDAD MIGRATORIA DE EU NO OPERARÁ EN ZONAS DE REFUGIO DE “HARVEY”
La Patrulla Fronteriza (CBP) de Estados Unidos aseguró hoy que no operará en las zonas de refugio, evacuación o asistencia activadas para proteger y atender a los posibles damnificados del ciclón “Harvey”, que se espera que llegue en las próximas horas a Texas convertido en un huracán de categoría 3.
“Las operaciones rutinarias de control de inmigración no criminales no se llevarán a cabo en los lugares de evacuación, ni en los centros de asistencia, como albergues o bancos de alimentos, aunque estaremos atentos a cualquier intento de criminales para explotar las interrupciones causadas por la tormenta”, señaló hoy a Efe una portavoz de la autoridad migratoria.
Así, la CBP mantendrá abiertos los puntos de control migratorios en las carreteras del estado sureño, tal y como anunció este jueves.
Harvey siguió hoy fortaleciéndose mientras se aproxima a la costa central de Texas con vientos sostenidos de 110 millas por hora (175 km/h) y está a punto de convertirse en un huracán de categoría mayor, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC), que ha advertido de las posibles “catastróficas inundaciones” que puede causar.
En una entrevista con la cadena NBC, el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, apuntó hoy que los inmigrantes indocumentados no tendrán que mostrar identificación para entrar en los centros de protección activados por la llegada de la tormenta tropical convertida en huracán.
Por otro lado, la citada vocera indicó que tanto la Patrulla Fronteriza como el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) resguardarán del ciclón a aquellas personas detenidas que estén bajo su custodia.
De hecho, los indocumentados que se encuentran en el centro de detención de Port Isabel (Texas), una localidad situada en la Isla del Padre, están siendo hoy trasladados temporalmente a otras cárceles fuera del camino proyectado del huracán por el NHC.
“Nuestros agentes estarán listos para ayudar a cualquier persona que necesite asistencia” dijo la portavoz, que aseguró que ayudarán a las autoridades locales de manera “rápida, segura y eficiente”.
Esta declaración de intenciones del cuerpo migratorio llega horas después de que se anunciara que los puestos de control de la Patrulla Fronteriza en Texas no serán cerrados “a menos que exista un peligro para la seguridad del público y de los agentes”.
“La Patrulla Fronteriza es una agencia policial y no abandonaremos nuestros deberes de cumplimiento de la ley “, señaló la autoridad en un comunicado este jueves.
Ante este planteamiento, la directora de políticas migratorias de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), Lorella Praeli, señaló en un comunicado que la CBP está poniendo en riesgo a las personas indocumentadas por temor a las deportaciones.
“A medida que las personas buscan refugio del huracán Harvey, es probable que tengan que ir al norte o al oeste de Texas y tendrían que pasar por un puesto de control”, explicó hoy la activista.
Praeli calificó la decisión de mantener los puntos de control abiertos como “repugnante” y pidió a las autoridades que antepongan la seguridad pública al estatus migratorio de las personas.
La prensa local comparó Harvey con la tormenta tropical Allison, que arrasó la costa sureste de Texas en junio de 2001, provocando más de veinte fallecidos y causando casi 7 mil millones de dólares en pérdidas en el estado de la estrella solitaria.(AP/EFE)